El vitoriano Alberto Morrás se retira después de dos años como profesional

Antes de lo previsto, pero obligado por las circunstancias, Alberto Morrás dice adiós al ciclismo profesional. A sus 24 años todavía le quedaban muchos kilómetros por hacer, aunque el delicado momento que vive el deporte del pedal le ha pasado factura olbigándole a colgar la bicicleta con tan solo dos temporadas como corredor en la élite mundial. «La idea venía de hace unas semanas, así que no me costado mucho tomarla. Me siento afortunado de todo lo que he conocido y vivido», dice el vitoriano en una nota pública de despedida.

Morrás agradece también a los numerosos amigos que ha hecho en el ciclismo, al que pretende seguir vinculado de alguna manera, según desea. «Más allá de los resultados obtenidos, que pronto se olvidan, me quedo con las personas con las que he compartido tantos momentos». Quitará el gusanillo echando una mano a un amigo en la dirección de un equipo juvenil y quién sabe si en el futuro se presente otro tipo de opciones a mayor nivel.

De momento, sus estudios de Enfermería le dan para trabajar en un hospital de Vitoria y no empezar de cero, como es el caso de tantos deportistas en general y ciclistas en particular. Morrás, que ha defendido en sus dos cursos de profesional el maillot del Boavista, ha declinado la posibilidad de seguir en el pelotón portugués en las más que limitadas condiciones económicas que le proponían para el nuevo ejercicio.

Al conjunto luso llegó el ciclista alavés desde el Seguros Bilbao amateur, con el que logró varios triunfos y siendo un referente en la categoría sub'23. Destacado escalador y buen contrarrelojista, Alberto Morrás ha pagado así la crisis que acucia al mundo del ciclismo y que le ha sumido en una escasez de equipos que ha desembocado con varias decenas decorredores profesionales en el paro, entre ellos él.