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MARÍA SOTO CANO MARÍA SOTO CANO PREPARA UNA MONOGRAFÍA SOBRE NEMESIO MOGROBEJO.
Martes, 6 de abril 2010, 04:32
Hoy hace cien años falleció en la ciudad austriaca de Graz el escultor Nemesio Mogrobejo (1875-1910). Gran conocedor de la escultura clásica y renacentista, fue, pese a su corta vida, precursor de formas aún no conocidas en la escultura española de la época, relacionadas con el Modernismo y el Simbolismo. Obras maestras como 'Hero y Leandro' (1904), 'La muerte de Orfeo' (1904-1906) y 'Mujer con uvas' (1909), las tres en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, permiten clasificarle como uno de los mejores escultores del momento. A pesar de ello, continúa siendo hoy, cien años después de su muerte, un artista casi desconocido.
De Bilbao a París
Dimas Nemesio Mogrobejo Abásolo nació el 25 de marzo de 1875 en el número uno de las Calzadas de Mallona, en pleno casco viejo bilbaíno. Huérfano a temprana edad, quedó bajo la tutela de su hermano mayor, Salustiano, el cual apoyaría económicamente su carrera y mantendría (tarea continuada por sus herederos) el legado del artista después de su desaparición. Mogrobejo se inscribió en 1889 en la Escuela de Artes y Oficios de Bilbao, compaginando sus estudios con la formación práctica en el taller del escultor Federico Sáenz Venturini. Entre 1894 y 1897 residió en París gracias a una pensión otorgada por la Diputación vizcaína. Allí frecuentó las aulas de las academias Julian y Colarossi, se relacionó con artistas modernistas y simbolistas, entre ellos Paco Durrio (1868-1940), y conoció al amor de su vida: la austriaca Paula Scheneck (1877-1898). De este periodo parisino es el emotivo relieve 'Maternidad' (1895), también en la colección del Museo, que evoca el primer renacimiento italiano.
Prototipo romántico
Junto con Paula, Nemesio vivió dos años de felicidad, que terminaron en tragedia ante la inesperada muerte de la joven en 1898 y el posterior fallecimiento del hijo de ambos. Sumido en la desesperación, vagó desde Etterbeck (Bélgica) a Venecia (Italia), Graz (Austria) y Múnich (Alemania), para retornar a su ciudad natal en 1902. Obsesionado con la lectura de 'La Divina Comedia', tras haber perdido a 'su Beatriz', creó entonces sus obras más melancólicas y simbolistas, entre las que destacan un febril ciclo sobre el citado texto de Dante y la 'Tumba de Paula' (1898-1899), un ondulante relieve decorativo adornado con los versos de su amigo Charles Morice (1860-1919).
El descubrimiento de Italia
Tras este desdichado periodo, en 1902 recibió una nueva pensión de la Diputación vizcaína que, durante cuatro años, le permitió residir en Italia. Instalado primero en Roma y después en Florencia, llevó a cabo en ambas ciudades algunos de sus trabajos más maduros y plenos: 'Risveglio' (1903), 'Eva' (1904), 'Hero y Leandro' y 'La muerte de Orfeo', reflejos del clasicismo florentino y el manierismo miguelangelesco pero reinterpretados desde una estética simbolista y moderna.
Enfermedad y muerte
A partir de 1906 estuvo aquejado de una tuberculosis, que no le impidió ejecutar varios encargos, sobre todo retratos para la pudiente sociedad bilbaína, ni participar en la edición del diario local 'El Coitao' (1908). Creador y viajero incansable, residió hasta 1910 en varios lugares de España, Francia e Italia. En 1909 se trasladó a Barcelona, donde fundió en plata cuatro relieves para el empresario vasco Horario Echevarrieta, y realizó su última exposición en vida. El 6 de abril de 1910 completó su tortuoso peregrinaje hacia la muerte en la ciudad austriaca de Graz, donde yacería junto a su amada Paula.
La labor del Museo
Como excepción al olvido general, el Museo de Bellas Artes de Bilbao ha promovido en los últimos años varias iniciativas para la recuperación de este importante escultor del cambio de siglo. En primer lugar, la adquisición reciente de varias obras hace que la institución cuente hoy con la más importante representación de obras de Mogrobejo. De este modo, en los últimos años se han adquirido piezas tan significativas como 'Hero y Leandro', clave en la escultura española del periodo, y el extraordinario bajorrelieve en plata 'Mujer con uvas', uno de los encargados por Horario Echevarrieta que aúna el espíritu sezessionista austriaco con la corporeidad del desnudo miguelangelesco. Además, ha puesto en marcha un estudio monográfico y catálogo sistemático de su producción a través de una Beca de Investigación BBK-Museo. Por último, prepara para 2011 una exposición monográfica, que será la primera que se realice desde 1910, cuando el crítico Juan de la Encina organizó en Bilbao una pequeña muestra-homenaje meses después del fallecimiento de Nemesio Mogrobejo.
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