Vegetariano y de Bilbao

Un tradicional restaurante vizcaíno sin una buena chuleta es algo así como una feria de Santo Tomás sin talo o una Aste Nagusia sin fuegos artificiales. Y es que Bizkaia es tierra de chuletón, bacalao y marmitako. Un paraje ideal para miles de foráneos y nativos, pero que no a todo el mundo acaba de convencer. Por eso Bilbao también ofrece alternativas para los que han decidido desterrar la carne y el pescado de su dieta. Una gastronomía que, curiosamente, escala posiciones en las preferencias de los paladares más exigentes, hasta ahora habituados a las bondades de la cocina vasca. Y es que la preocupación por una alimentación sana y equilibrada, así como el culto al cuerpo hacen que la tendencia vegetariana tenga cada vez más adeptos.

La villa ofrece, aunque no demasiadas, sí varias opciones para los aficionados a la comida verde. Los restaurantes Garibolo, Borne y Berdea son los únicos vegetarianos de pro que existen en la ciudad, aunque los tres disponen de menús de calidad, capaces de cambiar de opinión hasta a los comensales más reacios a esta dieta. Y es que, en contra de lo que muchos piensan es frecuente escuchar aquello de ingredientes poco apetitosos o aburridos-, sus platos guardan más secretos que cuatro hojas tristes de lechuga y un cuenco de garbanzos. Son auténticos templos del buen comer. En el recetario de estos locales se puede degustar un festival de ingredientes frescos y apetecibles, llenos de sabor y de colorido a partes iguales. ¿Te animas a probar?

El restaurante Garibolo es uno de los pioneros de la cocina vegetariana en Bilbao. Ubicado en Fernández del Campo, 7, no dispone de carta, sino que cuenta con una gran variedad de menús. El del día de lunes a viernes- se puede degustar por 13,50 euros; el de sábado a mediodía, por 15,50; el de domingos y festivos, por 18,50 y el de las cenas de viernes y sábado, por 22,50.

Cuenta con un arsenal de más de 800 recetas que los cocineros combinan a diario para hacer propuestas diferentes y atractivas. ¿Su especialidad? Las albóndigas vegetales y el postre de zanahoria, coco y chocolate son los dos platos que más piropos cosechan.

En la calle General Castillo, 3 se encuentra el restaurante Borne. Txema y su hija están al frente de este negocio que levantó la persiana hace ya una década. Su trato cercano lo convierte en un lugar tan acogedor que a uno le hacen sentir como si estuviera en su propia casa. Un dato: Cualquier naturista estricto consideraría una contradicción infranqueable que se sirva carne en su establecimiento. Pero Txema, vegetariano convencido, siempre guarda un poco de pollo en la nevera por si algún enemigo declarado de las verduras acude a su local un poco obligado. Un detallazo, sin duda.

Especializado en alimentación vegana -cualquier producto de origen animal como huevos, leche o miel queda descartado-, los productos de temporada y la elaboración artesanal son su seña de identidad. Prefiero emplear mi tiempo en la cocina que comprar comidas medio hechas, apunta Txema. Un acierto que se refleja en las deliciosas hamburguesas, sabrosas lasañas o mousses de chocolate que prepara. Por 10,50 euros se puede degustar los mediodías de lunes a sábado un menú que, sin duda, no te dejará indiferente.

Para cubrir un sector que goza de poca oferta en Bilbao, Carmelo y su mujer, Soraya, decidieron abrir hace 27 años el restaurante Berdea. Ubicado en el barrio bilbaíno de Deusto (c/ Gipuzkoa, 7) ofrecen a sus comensales su buen hacer en la cocina, sazonado con un trato exquisito.

De lunes a viernes (13.00 - 16 horas), ofrecen un menú por 11,50 euros que consta de ensalada hay tres para elegir-, sopa escoger entre dos-, plato principal tres opciones-, postre, bebida (vino y cerveza ecológicos) y pan (ecológico de espelta).

Restaurantes mixtos

La comida vegetariana también tiene su espacio en restaurantes tradicionales, pizzerías o hamburgueserías. A continuación, te detallamos una selección de algunos de los locales con más solera de Bilbao.

Baskook (c/ Barroeta Aldamar, 8): Carpaccio de arroz Byriani, pistacho verde, alicurry y sal de jengibre; Kebab- espárragos con toffe achicoria y yogurt de albahaca o HummusBurger en vigilia y mahoalmendra. Para una persona no acostumbrada a estas delicias, la carta de Baskook más bien puede parecerle un catálogo de alimentos sacados de El planeta de los simios. Pero nada más lejos de la realidad. Porque en los fogones del restaurante de Aitor Elizegi se cocina con clase y con gusto. Con mucho gusto, mejor dicho. Ofrecen un menú -que ronda los 26 euros- dividido en tres partes iguales. Un tercio es comida vegetariana; otro está basado en productos de la huerta vizcaína y en el último, el prestigioso cocinero descubre los platos que más le han gustado en sus visitas a otros lugares del mundo.

Kasko (c/ Andra Maria, 16): En el Casco Viejo encontramos este creativo y vanguardista restaurante, donde se fusiona la gastronomía, el arte y el diseño. Ofrece una carta variada, en la que no falta una opción verde, que ronda los 20 euros. ¿Sugerencias? Se pueden degustar platos tan deliciosos como el carpaccio de tomate y mozzarella con rúcula y frutos secos en vinagreta de pistachos; la lasaña de hongos y frutas confitadas con reducción de higos secos o la paella de verduras con alioli.

Patxi Larrocha (c/ Pablo de Alzola 8): El local, heredero del antiguo Azak -primer restaurante ecológico de Bilbao-, fue remodelado hace dos años y medio. El lavado de cara lo convirtió en un lugar espacioso y moderno, donde ir a comer se convierte en una experiencia más que agradable. La carta, además de comida casera con recetas tradicionales y alguna renovada, está repleta de productos de la huerta y platos vegetarianos. Abren todos los días y el menú ronda los 12 euros.

Pizzería Grossi (c/ Manuel Allende, 12): El negocio dirigido por Fausto es una cita ineludible para los amantes de la comida italiana. Si eres vegetariano y todavía no lo conoces, seguro que también te sorprenderá. El establecimiento, uno de los mejores lugares para comprar pasta fresca en Bilbao, ofrece además unas pizzas exquisitas que se caracterizan por su forma rectangular. La lista de pizzas vegetarianas es inmensa: de berenjena, margarita, hortelana, de cebolla pero sin duda, la que más éxito tiene es la de calabacín con queso provolone.

Pizzería La Vía (c/ Santa María,1 y Somera, 6): La carta de esta pizzería está dividida en 7 secciones: clásicas, vegetarianas, picantes, con pescado, con carne, de quesos y dulces. Sí, también hay pizzas de chocolate. En todas sus variantes, ofrecen un producto de calidad en tres tamaños diferentes: individual (30 centímetros de diámetro y ronda los 8 euros), familiar (50 cm y 18 euros aproximadamente) y porciones sueltas. En lo que a las vegetarianas se refiere, se elaboran con ingredientes de la huerta y queso de importación, de auténtico label italiano, vamos. ¿Sugerencias? La pizza Miren (tomate, mozzarella, nueces, rúcula y gorgonzola), Anboto (tomate mozzarella, cebolla, pimiento y champiñones) o Boske (tomate , mozzarella, champiñones y mixto de setas) son tres de las variedades verdes que no te puedes perder.

Pura Burguer (c/ Iturribide, 42): Esta hamburguesería, ubiada también en el Casco Viejo, ofrece en su carta hamburguesas vegetarianas, sándwiches vegetales, ensaladas y raciones (con mayonesa de tofu y otras salsas veganas). ¿Recomendaciones? La burguer Santa Cruz, que lleva hamburguesa de lentejas, tofu a la plancha, paté de tomates secos y cebolla a la plancha y la San Diego, compuesta por seitán, cebolla a la plancha, pepinillo y tofu a la plancha. El local también dispone de una pastelería vegana que llama la atención hasta al menos goloso. Los muffins de chocolate-nata y chocolate y el pastel de cacao y vainilla con glaseado de chocolate están realmente deliciosos.