Homenajean en Bilbao a una etarra muerta en 1987 mientras preparaba un coche bomba

La miembro de ETA María Teresa Pérez Cever, fallecida en 1987 mientras preparaba un coche bomba en San Sebastián, fue homenajeada ayer en Bilbao, coincidiendo con el aniversario de su muerte.

La etarra, vecina de Bilbao, murió, junto con Rafael Etxebeste Garmendia, mientras manipulaba un artefacto que contenía 30 kilos de amonal en el interior de un Peugeot 505 robado. Ambos preparaban un coche-bomba contra un edificio oficial, posiblemente el Gobierno militar del San Sebastián, dado que una hora antes del suceso la DYA recibió una llamada alertando de que en el plazo de 60 minutos haría explosión un artefacto frente al citado inmueble.

Según Askatasuna, la organización de apoyo a los presos de la banda, el acto de homenaje, que tuvo lugar en Solokoetxe, en el Casco Viejo de la capital vizcaína, comenzó con una sesión de bertsolaris e incluyó la entrega de un obsequio para los padres de la homenajeada enviado por el preso de ETA Joseba Artola Ibarretxe, miembro del 'comando Orbaizeta' y condenado por participar en el asesinato del peluquero Agapito Sánchez (1985) y el comisario Raimundo Moya (1981), así como por la colocación de varias bombas.

El acto, siempre según Askatasuna, también contó con la intervención y saludo de honor de miembros de la izquierda abertzale del barrio.