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sara borondo
Martes, 9 de febrero 2021, 00:50
La voz es una de las herramientas más poderosas del ser humano. Los mensajes escritos pueden (y suelen) malinterpretarse porque no siempre se capta la intención de emisor. A algunas personas les cuesta escribir en las aplicaciones de mensajería instantánea, ¿quién no conoce a alguien que casi siempre envía mensajes de voz en lugar de escribir? Algunos incluso parece que están grabando un programa de radio en lugar de contar lo que les sucedió ayer. En las redes sociales la voz desempeña también un papel relevante, ya sea en los audiolibros que han llevado al primer plano servicios como Audible; los podcast cada vez más en auge o la nueva red social 'Clubhouse: Drop-in audio chat'.
Clubhouse es una red de mensajería que apuesta de forma decidida por los mensajes sonoros. Sus creadores son Paul Davison y Rohan Seth; este último tiene una hija que nació con una enfermedad genética rara y estaba intentando crear algo que la ayudase, según explica la propia web de la aplicación. Los dos decidieron unir fuerzas y lanzaron Clubhouse en marzo del año pasado con el objetivo de lograr una experiencia social en la que, en lugar de publicar mensajes, se pudiera hablar con otras personas. La app llegó al tiempo que empezaba la pandemia, y en esos momentos de incertidumbre y soledad resultó lógico que triunfase. Tal así que la propuesta consiguió una financiación inmediata de 100 millones de dólares (83 millones de euros).
La aplicación es una especie de chat de sonido que permite escuchar las conversaciones de personas que quieren que otros oigan lo que dicen. Al entrar hay que indicar qué temas son los que más interesan y el algoritmo actúa para ofrecer sugerencias y proponer contactos. En el menú principal hay una especie de 'pasillo' que muestra las salas a las que se tiene acceso indicando el tema, quiénes son los oradores y el número de personas que están escuchando la charla. Al entrar en una sala se pide turno para hablar y el moderador decide si concede la palabra (no hay opción de enviar mensajes de texto ni fotos). El usuario también puede abrir una sala nueva o incluirla en el calendario que está dentro de la misma app para que la tenga en cuenta quien pueda estar interesado. Los usuarios pueden agruparse por clubes con gustos comunes y así ampliar el intercambio de información o los contactos en torno a un tema específico.
Bajo este modelo se pueden organizar congresos virtuales interactivos que, además, se pueden consumir casi en cualquier momento, ya que no requieren estar pendiente de la pantalla del móvil. Las conversaciones no se graban ni se transcriben, lo que anima a que sean más distendidas y menos guionizadas; se transmite más sensación de cercanía con los oradores.
El éxito de la incipiente red social ha sido tal que ha sorprendido a sus creadores y los servidores se han saturado en varias ocasiones. De momento está en pruebas, pero se han acercado a ella famosos como el músico Drake, los actores Ashton Kutcher y Jared Leto o el mismo cofundador de Tesla, Elon Musk (el principal inversor en Clubhouse es la empresa Andreessen Horowitz, que también participa en algunas startups con las que trabaja Musk), a cuya charla se unieron 5.000 personas.
El objetivo es que en los próximos meses los creadores de contenido que impartan las charlas puedan recibir pagos, ya sea mediante propinas o suscripciones. Davison y Seth sostienen que la seguridad del usuario es una de sus prioridades, por lo que están invirtiendo en herramientas para detectar y prevenir abusos, así como en la formación de los moderadores. Además, los fundadores trabajan ya en la aplicación para Android y buscan traducirla a otros idiomas.
Una de las características que destaca de Clubhouse es el buen ambiente que desprende. No hay opción de dar 'me gusta' a una charla o una sala, sino que se trata de seguir a gente que hable de los temas que interesen a cada persona. Si al usuario le gusta un orador específico puede fijar un recordatorio para que le avise de su próxima intervención. Todo el menú es fácil de entender y muy intuitivo.
En estos momentos no se puede acceder libremente a Clubhouse. Sólo es posible ingresar con invitación de alguno de los usuarios que ya están activos en la app, quienes inicialmente cuentan con dos invitaciones para nuevos miembros (aunque van recibiendo más a medida que consiguen seguidores). Sí que puede reservarse un nombre de usuario para utilizar una vez pertnezcamos a la red.
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