Nuevos rumores sobre 'Reality Pro', el revolucionario visor de Apple

The Information hizo saltar la liebre hace unos días al filtrar las supuestas especificaciones del gadget. Atesoraría dos paneles Micro OLED a resolución 2K, sendos chips de 5 nanómetros (M2 y su complementario) y una batería externa diseñada para colgarse del pantalón, con una duración estimada de 2 horas.

Hablaríamos entonces de un visor liviano (fabricado en aluminio y fibra de carbono); con un campo de visión de 120 grados, distancia interpupilar automática, lentes graduadas acoplables para quienes usen gafas, sensores LiDAR para el escaneo tridimensional del entorno y emparejamiento de audio a mínima latencia gracias al chip H2 (presente en los AirPods Pro de segunda generación). Con todo, Reality Pro albergará sus propios auriculares y una banda de sujeción fabricada al estilo de las correas intercambiables del Apple Watch.

Las fuentes de la cabecera especializada también hablan de un sistema de seguimiento avanzado tanto de los ojos como de los gestos faciales, las manos y el resto del cuerpo. Todo ello sin necesidad de mandos específicos y primando un diseño sobrio, en el que las cámaras permanecerán ocultas a simple vista.

La mejor carta de presentación del aparato sería en cualquier caso su compatibilidad con todas las aplicaciones existentes para iOS, dado que el nuevo sistema operativo (apodado xrOS) bebe directamente de la versión móvil.

Habrá que esperar para conocer las primeras aplicaciones diseñadas expresamente para Reality Pro. Más concretamente hasta la próxima primavera, si tenemos en cuenta las predicciones de la comunidad de análisis. Ming-Chi Kuo augura su presentación durante la Worldwide Developers Conference de junio, mientras que Mark Gurman la emplaza unas semanas antes, reservándose la WWDC para la puesta de largo de xrOS: «Apple tenía previsto lanzar Reality Pro este mes de enero, pero lo ha pospuesto hasta primavera, antes de la WWDC. En junio será cuando muestre sus características de software a los desarrolladores, por lo que el lanzamiento comercial no llegaría hasta otoño de 2023», explica el analista.

Estos retrasos de última hora se deberían, nuevamente según ambos analistas, a unas pruebas de resistencia poco fiables, al sobrecalentamiento de la batería y a complicaciones con las herramientas de desarrollo. Inconvenientes que estarían atajándose en estos momentos para garantizar un lanzamiento lo más exitoso posible. Esto último considerando un precio rumoreado al alcance de pocos bolsillos: en torno a 3.000 dólares, lo que nos dejaría ante un visor de uso exclusivamente profesional.