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Aunque se esperaba una 'keynote' menor, Apple realizó infinidad de anuncios en la tarde de ayer. Incluidos muchos de los que se vaticinaban próximos a la Worldwide Developers Conference de junio, su gran evento para desarrolladores. Tres gamas de producto recibieron importantes revisiones, ... al tiempo que se estrenaba una cuarta (los cacareados 'AirTags').
Uno de los equipos de sobremesa más populares, el iMac, ha sufrido un completo lavado de cara. Referido por algunos como un 'iPad' con peana, el nuevo modelo (de 24 pulgadas) destaca por su extrema delgadez y su acabado en ocho tonalidades (rojo, naranja, amarillo, azul, morado, verde y plata, que nos recuerdan al colorido iMac G3).
Bajo la carcasa encontramos el prodigioso chip M1 de Apple, que ha permitido una importante reducción de componentes y un salto de gigante en términos de rendimiento. Según Apple, hablamos de una CPU un 85% más potente que la de la generación anterior y de una GPU (unidad de procesamiento gráfico) el doble de capaz. Además se listan tres micrófonos de estudio y un sistema de audio de seis altavoces.
Respecto a la pantalla de marcos reducidos, goza de una resolución 4,5K (4.480 x 2.520 píxeles), tecnología True Tone, gama de color P3 y un brillo tope de 500 nits. Sobre ésta se ubica una cámara FaceTime 1080p y en la trasera cuatro puertos Thunderbolt USB-C.
Los nuevos iMac vienen acompañados de teclados y ratones a juego, destacando la inclusión de la tecnología Touch ID en los primeros. El modelo con CPU de 8 núcleos, GPU de 7 núcleos y 256GB de almacenamiento interno partirá de los 1.449 euros a mediados de mayo.
En su objetivo de acortar distancias entre los distintos productos de su ecosistema, Apple ha dado el siguiente paso crucial: su mentado chip propietario (M1) también se integra en los nuevos iPad Pro.
Las tabletas electrónicas más avanzadas hasta la fecha se ofrecerán además con varias opciones de almacenamiento (128GB, 256GB, 512GB, 1TB o 2TB) y memoria RAM (8 o 16GB), lo que en términos prácticos supone una capacidad de procesamiento sin parangón. No por nada podrán conectarse a monitores Pro Display XDR (a través del nuevo puerto Thunderbolt) para trabajar a una resolución 6K nativa.
Otros añadidos de peso son la compatibilidad con redes móviles 5G, el abrazo al estándar WiFi de sexta generación y un avanzado sistema de cámaras: delantera de 12 megapíxeles con ángulo de 122 grados y encuadre centrado automático; y trasera con sensores gran angular, ultra gran angular y escáner LiDAR.
El iPad de 12,9 pulgadas alberga también una pantalla revolucionaria, bajo la cacareada tecnología miniLED: hasta 1.600 nits de brillo, ratio de contraste 1.000.000:1, 2.500 zonas de atenuación local, gama cromática P3 y una frecuencia de refresco adaptativa que alcanza los ansiados 120 hercios.
El nuevo iPad Pro de 11 pulgadas (con pantalla Liquid Retina) parte de los 879 euros (WiFi con 128GB de almacenamiento), mientras que su hermano mayor lo hace de los 1.199 euros. Llegarán a las tiendas en la segunda mitad de mayo.
Llevaba tiempo rumoreándose y ya es oficial: el reproductor multimedia de Apple mejora sus prestaciones para adecuarse a los últimos lanzamientos de Apple Arcade, el repositorio de juegos por suscripción de la multinacional californiana. Sin embargo, no estamos ante el salto de rendimiento que muchos esperaban, ya que pasamos de un chip A10X a un A12 Bionic.
Otras novedades son el soporte a Wi-Fi 6 y un puerto HDMI 2.1, en teoría capaz de ofrecer una tasa de refresco de 120 hercios (Apple señala un máximo de 60 frames por segundo para la reproducción de contenido HDR, incluidas las tomas en Dolby Vision realizadas con los flamantes iPhone 12 Pro y Pro Max).
Finalmente, el Apple TV 6 renueva por completo el controvertido Siri Remote, sustituyendo su imprecisa superficie táctil por una 'clickwheel' al estilo de los míticos iPod. Incluye además botones de encendido, silencio y micrófono (en un lateral, para llamar a Siri).
El nuevo Apple TV 4K llegará en mayo por 199 euros (con 32GB de almacenamiento) o 219 euros (con 64GB).
Tanto se habló de las balizas de localización de Apple que rivales como Samsung tuvieron tiempo de lanzar las suyas antes de que la primera pudiera anunciarlas. Finalmente ha ocurrido: los AirTags son pequeños dispositivos de acero inoxidable que podemos usar cual llavero o adherir a infinitos objetos de uso cotidiano (carteras, mochilas, maletas...), de forma que podamos ubicarlos en todo momento gracias a la aplicación 'Buscar' de nuestro iPhone.
Utilizan tecnología Bluetooth de bajo consumo (la pila intercambiable promete un año de autonomía), son resistentes al agua, integran un pequeño altavoz para que podamos encontrarlos acústicamente y se sirven de las señales emitidas por cualquier iPhone, iPad o Mac cercano (sin importar el propietario) para triangular su posición. Esto último facilita encontrar nuestras posesiones en caso de pérdida, lejos de casa.
Los AirTags se venderán a partir del 30 de abril por 35 euros la unidad (119 euros el paquete de cuatro). Apple también ofrecerá correas y llaveros a los que acoplarlos.
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