'The Crew Motorfest': el festival de la conducción

LLa tercera entrega de The Crew ('Motorfest') nos traslada a la isla de Oahu para tomar parte en un vertiginoso festival. Semejante localización consigue que los escenarios resulten espectaculares: carreteras asfaltadas, caminos selváticos, zonas volcánicas...

Si lo anterior os ha recordado a Forza Horizon no es por casualidad. Las similitudes están ahí, pero también es verdad que Motorfest alberga vehículos ajenos a la franquicia de Playground Games: motos, quads, aviones, lanchas de agua… Además, a medida que profundizas en el título; en su su oferta multijugador y en el enfoque del modo historia (estructurado mediante playlists), empiezas a ver los matices que hacen que este The Crew tenga personalidad propia.

En un mapa tan extenso como el que nos concierne, las opciones de navegación rápida y cambio instantáneo de transporte (entre los más de 600 incluidos) son fundamentales para explorar a nuestro aire. También para ir cumpliendo los cuantiosos objetivos y actividades diseminados a lo largo y ancho de la isla.

Donde más se nota la diferencia entre Motorfest y Forza Horizon es precisamente en el manejo de los vehículos: aquí lo arcade se lleva al siguiente nivel; no se penaliza tanto el fallo, lo que casa perfectamente con el tono del juego.

En cuanto a la narrativa y la ambientación, desconcierta un poco el contraste entre el mentado festival y las historias sobre el mundo del motor que van intercalándose. Todo ello en perfecto inglés con subtítulos en castellano, lo que dificulta prestar atención mientras pisamos el acelerador (si no estamos versados en la lengua de Shakespeare). En este sentido, hubiésemos agradecido el doblaje a nuestro idioma o al menos que los audios pudiesen escucharse fuera de las mentadas playlists.

Estas últimas son básicamente capítulos enmarcados en diferentes marcas o culturas del motor. Cada uno comprende varias carreras únicas con modelos diferentes, a través de las cuales conseguir experiencia, objetos de personalización, mejoras y créditos. Además, una vez completadas las competiciones principales se desbloquean objetivos adicionales de recompensa: radares de velocidad, capturas fotográficas... todo suma para comprar otro coche con el que aumentar nuestro garaje o superar alguna playlist que tenga como requisito conducir un vehículo concreto.

El nivel de personalización es quizá uno de los puntos flacos del juego, ya que si bien ofrece opciones de mejora, éstas se basan en ir consiguiendo una especie de cartas: no hay configuración de opciones alguna.

Más suerte corre el apartado multijugador, que bebe del sistema implementado en 'Riders Republic' para hacer que el título se sienta vivo. Todo gracias a los eventos masivos: podemos ir conduciendo tranquilamente y toparnos con varias decenas de usuarios en plena carrera. Por poner un pero, que más de 25 personas corran a la vez tiende al caos: muchas veces, nuestras opciones de victoria pasan por tener la suerte de no tropezarnos con algo que nos saque de la pista o nos frene en seco.

Motorfest se antoja pues un digno contendiente en el segmento de la conducción arcade y, teniendo en cuenta el amplio soporte post-lanzamiento que recibió 'The Crew 2', todo parece indicar que Ubisoft ha planteado un desarrollo a largo plazo que nos mantendrán al volante un sinfín de horas. Si eres fan de la saga, este The Crew Motorfest es más grande y mejor: no puede faltar en tu biblioteca.

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