'The Centennial Case: A Shijima Story' reivindica el full motion video

Aunque el género no se ha extinguido por completo: hace unos años recibimos el enigmático 'Her Story', que proponía dar una vuelta de tuerca a lo ya conocido; además del no tan exitoso 'The Quiet Man', desarrollado por la propia Square Enix. De sus propias manos nos llega ahora 'The Centennial Case: A Shijima Story', una nueva historia de asesinato y misterio, de características similares a las clásicas 'visual novels' pero conservando esa particularidad de película interactiva.

El pilar fundamental del juego es el factor narrativo: una cinta de 15 horas que podríamos calificar de 'serie B'. A nivel jugable no aporta más de lo visto en clásicos como 'Famicom Detective Club', donde explorábamos escenarios para recoger las pistas que iban dejando los personajes (pasando luego a un proceso deductivo). Con sus virtudes y condiciones, The Centennial Case cuenta con todos los elementos necesarios para congratular al fan de este tipo de fórmula.

Todas las limitaciones necesarias que presenta el género se ven suplidas por el factor cinematográfico. El juego nos pone en la piel de una novelista que se ve involucrada en una algarabía de muertes. Lo novedoso aquí son los saltos temporales en la ambientación: el mismo elenco de actores interpreta a diferentes personajes en cada época visitada, aunque nuestro vehículo narrativo es en todo momento la misma escritora. Un punto de originalidad añadido que, aunque de primeras resulte confuso, gana enteros en efectividad según avanza la trama.

En la mentada fase de deducción es donde encontramos todo el músculo jugable del título, minijuego mediante: se nos expone una pregunta referida al caso que respondemos mediante una serie de casillas a modo de 'palacio mental'. En ellas colocamos los objetos relacionados (escenas clave, personajes, conceptos...) que permitan dar con la tecla. Habrá ocasiones en que las pistas no serán suficientes como para terminar de refutar los argumentos del acusado, así que tendremos que ingeniárnoslas para acertar con la mínima información posible.

El minijuego es el aspecto que más flojea del título, quizás por lo sencillo que resulta acertar con las premisas incluso sin haber recogido todas las pistas. Por un lado, se agradece el no quedarnos atascados a cada paso por la complejidad de cada reto, pero por otro, tanta accesibilidad reduce la interacción a una experiencia más contemplativa que otra cosa. A la hora de señalar al asesino, el juego gana algo más de enjundia, aunque al errar podemos reintentarlo todas las veces necesarias (a costa de perder puntuación, claro).

Con respecto a lo técnico, poco más se puede decir: el equipo al cargo tiene experiencia en desarrollos como 'Metal Gear Solid 5' y 'Final Fantasy XV'; la historia guarda un tono similar al del cine japonés, así que para los más aficionados no supondrá un choque cultural demasiado grande. El juego se encuentra traducido por completo al castellano, con voces a elegir entre el inglés y el japonés. Obviamente recomiendo el original, sobre todo por la mediocre sincronización labial de la versión doblada.