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José Domínguez
Miércoles, 30 de enero 2019
Euskadi no es Barcelona ni Madrid, ni por dimensiones ni por número de licencias, y parece casi descartable que los taxistas vascos o los chóferes de los vehículos de transporte con conductor (VTC) se echen a la calle para exigir reivindicaciones. Ambas partes ... han preferido sentarse en una mesa para consensuar las condiciones que deben regir su actividad diaria de modo que se garantice la convivencia. Y lo han hecho este miércoles a la mañana en la primera sesión conjunta de la Ponencia del Taxi que se ha celebrado en el Gobierno vasco y en la que también han participado los ayuntamientos a través de Eudel, tras el compromiso adquirido por la consejera de Desarrollo Económico e Infraestucturas, Arantxa Tapia, de asumir la facultad conferida desde el Ejecutivo central de regular el sector mediante la aprobación de una normativa «armonizada» que, en principio, entrará en vigor antes de fin de año. A cambio, los dos gremios profesionales confirman su renuncia a la confrontación y a la convocatoria de cualquier acto público de protesta que altere el orden público.
Esta mesa sectorial, según han avanzado fuentes del Ejecutivo autónomo, trabajará por regular «total o parcialmente» varios aspectos de la actividad de los VTC como las condiciones de precontratación, en las que la Federación Vasca del Taxi aboga por exigir que se haga con una hora de antelación. También se contempla abordar cómo se realizan los servicios -la propuesta es que el VTC tenga que volver a la base para coger a un nuevo cliente-, los horarios e incluso el ámbito territorial que se pueda cubrir.
El concejal de Movilidad en el Ayuntamiento de Bilbao, Alfonso Gil, ha mostrado su satisfacción por la «buena sintonía» percibida en la reunión, «donde los dos sectores han asegurado ser conscientes de que no pueden hacer lo mismo, que el servicio público del taxi en cada núcleo urbano es una cosa y el transporte discrecional otra pero que, como hasta ahora, se pueden seguir complementando perfectamente». Además, el teniente alcalde ha asegurado que los VTC se han mostrado «bastante receptivos» con los planteamientos de la Federación Vasca del Taxi, que también pide que el control de esta regulación incluya un sistema telemático que determine los recorridos realizados.
Conscientes de las dificultades que este trabajo entraña, y de las discrepancias que pueden surgir, todas las partes destacan la importancia de haber habilitado un foro integrado por los diferentes agentes, y reconocen que este espacio es el único cauce posible para avanzar en una regulación actualizada para las VTC. De esta manera, el Gobierno vasco se ha congratulado en el desarrollo de una regulación que «mejore la realidad concreta de Euskadi atendiendo de manera coherente al reconocimiento de derechos y a la exigencia de obligaciones».
Así, a partir de ahora, y en reuniones con una periodicidad al menos mensual, taxistas y VTC propondrán todas las casuísticas y plantearán sus diferentes posturas para avanzar en la redacción de la normativa definitiva. Y en este sentido, han remarcado su compromiso en favorecer un «escenario de trabajo para afrontar nuevos retos, facilitando que los desarrollos tecnológicos disponibles y la modernización de las flotas hacia vehículos de bajas emisiones permitan que la movilidad sostenible en el transporte de viajeros y viajeras de turismo sea también un referente en Euskadi».
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