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EL CORREO
Viernes, 18 de junio 2021, 10:42
David fue detenido el pasado 16 de junio y un día después confesó que había matado Wafaa Sebbah, una joven argelina que había desaparecido en Valencia el 17 de noviembre de 2019, aunque hasta 12 días después no se interpuso denuncia por su ausencia. ... Durante año y medio, la Guardia Civil investigó un posible crimen y finalmente ató los cabos.
David, de 30 años, es vecino de la población valenciana de Carcaixent, aunque la detención se produjo en el municipio de Manuel, y, según fuentes de la investigación, tiene diversos antecedentes policiales, «especialmente por delitos graves en el ámbito de Viogen», el sistema de seguimiento de los casos de violencia de género. Aunque inicialmente se mostró reacio a colaborar, al ver a su madre se habría derrumbado. Ante ella habría dicho que la mató y que se deshizo del cuerpo en otro lugar más alejado.
El detenido había acosado con mensajes por Whatsapp a Wafaa, presuntamente, para mantener relaciones sexuales con la chica, pero ella no accedía a las pretensiones de David. Por ese motivo, por la obsesión que sentía por ella, la Guardia Civil lo tuvo en el punto de mira.
Se da la circunstancia de que su hermano cumple condena en Eslovaquia por el asesinato a cuchilladas de su pareja en 2012: «Pobres padres, Tienen dos asesinos en la familia» comenta un conocido a la agencia de noticias Atlas. En su perfil de Facebook, David, apodado El Tuvi, aparece que estudió en la Universidad de California en Los Ángeles y desde la fecha de la desaparición de Wafaa, en 2019, sólo había publicado tres fotos.
El móvil de la joven estuvo apagado durante días, pero volvió a funcionar varios días después al conectarse a una zona wifi de un centro comercial de Carcaixent. Esto permitió a los investigadores retomar la pista, que les llevó hasta la estación de tren de Xàtiva. Aunque el equipo conjunto formado por agentes de la UCO y del Grupo de Homicidios de la Guardia Civil de Valencia, encargados del caso, no sabía aún a quién buscaban, descartaron que un sospechoso hubiera podido vender el teléfono.
Tras una intensa investigación, a mediados de junio de 2021, casi año y medio después de la desaparición de Wafaa, la Guardia Civil detuvo a David, que confesó que había matado a Wafaa y arrojado su cuerpo a un pozo en una finca familiar. La finca, situada en la urbanización Puig Gros es propiedad de la familia materna, concretamente del abuelo, y en ella reside la madre de David.
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