Rescatados los ocho marineros de un barco de Santoña, hundido a 53 millas al norte de Punta Galea

Después de catorce días pescando bonitos, el Marhvin se disponía a tomar rumbo al puerto de Santoña con la intención de vender la pesca conseguida durante todo este tiempo mañana martes. Pero todo se torció sobre las once y cuarto de la noche de este domingo, cuando este barco del cerco dio la voz de alarma al detectar una vía de agua en el casco.

Los controladores de Salvamento Marítimo de Bilbao coordinaron la emergencia, movilizando los medios para acudir en su ayuda: la embarcación Salvamar Alcyone, el helicóptero Helimer 206 y otro barco que artes fijas que faenaba cerca de la zona, casualmente también de Santoña, el Nuevo Salvador Padre. Este segundo buque prestó ayuda para tratar de salvar el Marhvin con sus bombas de achique. Cinco de los tripulantes saltaron a las balsas salvavidas y a bordo quedaron tres -el patrón, el motorista y un tercero- intentando por todos los medios evitar el hundimiento. Pero, a la vez, ya se estaban preparando para lo que se preveía inevitable y, tuvieron que abandonar el barco cuando la situación fue extrema y ya corrían peligro. También estos tres saltaron a las balsas. Los ocho subieron a bordo del Nuevo Salvador Padre a las 01.11 horas de esta madrugada, mientras el Marhvin iba desapareciendo de su vista.

Más tarde llegó al lugar del siniestro la embarcación Salvamar Alcyone, a la que fueron transbordados los ocho marineros, que los trasladó al puerto de Santoña. Llegaron a casa a las 06.45 horas.

«Están sanos y salvos, pero totalmente desolados. Llevaban catorce días faenando, y han perdido el barco y toda la pesca que llevaban», ha dicho a este periódico el patrón mayor de la Cofradía de Santoña, Miguel Fernández, después de pasar toda la noche en vela, pendiente del rescate del Marhvin, un barco familiar de pescadores santoñeses «de toda la vida».