Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
David González
Martes, 30 de mayo 2023, 01:13
Jaime, el valenciano de 33 años acusado de matar a su pareja en un apartahotel de Vitoria, se publicitaba en las redes sociales como el típico triunfador. Autoproclamado «emprendedor» presumía de más de 99.400 seguidores en Instagram, donde compaginaba consejos empresariales con fotografías ... de su familia, encajando además quejas puntuales sobre posibles estafadores que habían tratado de timarle.
El presunto asesino de Maialen, la vitoriana de 32 años embarazada de gemelos, fue detenido el domingo por la Guardia Civil en la AP-68, a la altura de Zaragoza, cuando huía en un taxi. Josu Erkoreka reconoció ayer que la Ertzaintza, cuerpo encargado de la investigación policial del crimen machista, sabía desde «el 29 de enero» que este hombre quebrantaba la orden de alejamiento de 500 metros impuesta por un juzgado de Torremolinos y aún vigente.
Noticia Relacionada
El Correo
Lo más llamativo de su cuenta personal son las numerosas imágenes de Maialen y de su hija en común. En su perfil, todavía abierto, da a entender que están juntos y felices, sin mención alguna a la orden de alejamiento dictada por un juzgado de Torremolinos y a su inclusión en una listado de posibles maltratadores. Esas manifestaciones públicas de devoción hacia su expareja sentimental formarían parte de una «estudiada estrategia de chantaje psicológico».
Noticias Relacionadas
David González
La realidad, por contra, era bien distinta. Tras dejarlo y reconciliarse, hacían viajes de ida y vuelta del Mediterráneo a Vitoria, la tierra que vio nacer y crecer a Maialen. Posiblemente el propósito de Jaime era eludir el cerco de la Justicia. En enero, por ejemplo, se establecieron en un céntrico hotel de la capital alavesa.
Citado en verano
Cuando efectivos de la Ertzaintza le interrogaron descubrieron que tenía un carné falso. Supuestamente lo utilizó para registrarse en el establecimiento hotelero. Debido a esta circunstancia, y según ha sabido este periódico, al delito de quebrantamiento se agregó otro de falsificación de documento oficial. Ambas causas están abiertas. Por ejemplo, en un par de meses tiene cita con el Juzgado de Violencia sobre la Mujer tras ser pillado junto a su ex saltándose el mandato judicial.
Medios internos de la Ertzaintza desvelan que este «emprendedor» pudo atacar a Maialen en el sofá de la habitación. Tras deshacerse del cuchillo pasó la noche en la estancia, donde los investigadores hallaron numerosas botellas y latas vacías así como restos de pizza.
Como detalló el vicelehendakari, la Policía autonómica registró dos actuaciones con Maialen y su agresor en Vitoria, a donde vinieron al menos en un par de ocasiones sólo este año. Aparte del atestado abierto en enero, el «18 de mayo» volvieron a interrogarla tras la alerta del personal del apartahotel, preocupados porque ella estaba alojada «con un nombre falso». Sin embargo, aseveró Erkoreka, no hubo arresto ni en el primero ni en el segundo episodio. ¿La razón? La víctima «no se sentía en peligro» y «comentó que estaba trabajando por la eliminación de la denuncia». En términos policiales esta acción se conoce como 'quebrantamiento voluntario'. «Se nos recomienda no detener y sí abrir ficha como investigado al sospechoso», desvelan ertzainas consultados.
En la Comunidad Valenciana, donde solían hacer vida, Maialen estaba catalogada como víctima de «riesgo extremo», según el sistema Viogen. Así se denomina el baremo de peligrosidad para afectadas por violencia de género usado en España, salvo en Euskadi que dispone de uno propio. En este sentido, y tras un nuevo maltrato en Castellón, una patrulla de la Guardia Civil la trasladó hace unos días hasta la capital alavesa para alejarla de su agresor y para que pudiera estar más cerca de su familia.¿Y qué catalogación le dieron en el País Vasco? El consejero de Seguridad no supo precisarlo. Tampoco si hubo o no entrevista con el entonces sospechoso. Ni por qué no se le detuvo y trasladó al Palacio de Justicia, donde desvelan que el atestado abierto en enero «fue remitido como procedimiento ordinario». Es decir, «no se nos advirtió» de la peligrosidad existente.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.