Un hombre mata a cuchilladas a su vecina en Vigo tras varios días acosándola con notas escritas

El suceso se produjo en el número 70 de la calle Zamora en torno a las nueve de la noche, y la mujer habría recibido varias cuchilladas. La Policía llegó al edificio poco después, alertada por lo ocurrido, tras oírse gritos de la víctima, María, de unos 40 años, aseguraron a este diario vecinos del inmueble. No obstante, también destacaron que eran habituales en la planta en que se produjo el crimen, la segunda. Precisaron que el detenido tenía fama de persona problemática, de la que tenían miedo por su conducta violenta, gritando contra los vecinos.

El hombre, Pablo, de unos 70 años, no trató de escapar tras acuchillar a su vecina y seguía en ese momento en la vivienda, donde lo encontraron los agentes, que lo esposaron y se lo llevaron al coche hasta las dependencias policiales. El detenido había sido empleado de Telefónica. Los vecinos destacaron su fijación y su extraño odio enfermizo con la mujer, a la que había mandado varias notas acosándola. Vivían puerta con puerta y la llamaba, aunque ella no abría. Según los testigos, la oyó llegar a su casa y aprovechó el momento para empujarla al interior y entrar en la vivienda, donde perpetró el homicidio.

Tras oír los gritos de auxilio, los primeros que acudieron se encontraron la puerta de la vivienda de la mujer con las llaves puestas y en el suelo una zapatilla. Cuando entró la Policía, estaba muerta en el pasillo de su casa. Muy poco después el presunto asesino salía de su piso con las manos ensangrentadas, chupándose un dedo y exclamando «está muerta, está muerta». Es probable que sea sometido a un examen psiquiátrico.

El equipo forense se presentó en el domicilio a las diez de la noche, cuando el supuesto homicida ya había sido trasladado a la Comisaría. La comisión judicial la encabezaba el Juzgado de Instrucción 6. Mientras, buena parte de los residentes se encontraban a las once de la noche en la puerta del inmueble: la Policía les obligó a quedarse fuera en tanto procedían con la investigación. No es el primer caso de violencia que se da en el mismo bloque, donde otro vecino ya había protagonizado hace unos meses un incidente al presentarse en una panadería con un cuchillo. En 2015, justo enfrente, un hijo mató a su madre mientras estaban viendo la televisión, y más tarde se acabó suicidando en prisión. Es habitual que la Policía patrulle por el entorno, una zona problemática.

Con el de ayer, sería el tercer homicidio del año que se comete en Vigo. Los anteriores fueron el de la calle Areal, en enero, muy violento, donde un joven asesinó a un hombre con el que mantenía una relación. Unos meses más tarde una mujer envenenó a su marido y se suicidó en su propio piso en las inmediaciones de la plaza de la Independencia. Ha habido ejercicios sin homicidios y ha sido raro que se produzcan más de uno o dos, así que 2022 va a resultar excepcional para la estadística negra. No fue el único suceso ocurrido ayer. Una persona fue rescatada del mar en la Ría de Vigo tras volcar la embarcación en la que navegaba alrededor de las 16 horas. El servicio dio aviso a Salvamento Marítimo, que comenzó a planificar un posible rescate. El helicóptero Pesca-1, que estaba preparado para participar en el operativo, no fue movilizado finalmente, ya que una embarcación recogió a la persona accidentada y la trasladó, junto con el barco volcado, al puerto.