«¡Lo han matado, lo han matado!», gritaba una amiga de Lukas Agirre, el joven de 24 años asesinado en San Sebastián

Lukas, que tenía otros dos hermanos, murió ayer tras ser apuñalado con un arma blanca en el cuello por parte de varios individuos, que fueron detenidos poco después por la Ertzaintza. Los agresores, de nacionalidad española, fueron arrestados poco después del crimen, ocurrido sobre las 6.20 horas en la plaza Okendo, en las inmediaciones del local donde había estado la víctima con algunos amigos.

El joven de 24 años había estudiado en Langile ikastola, en Hernani, pero al parecer solía pasar la gran parte del tiempo en San Sebastián, donde tenía amigos. Había estudiado diseño gráfico y ejercía de diseñador.

Su entorno está conmocionado por lo ocurrido. Algunos amigos que estaban con él y fueron testigos de lo ocurrido presentaron ayer por la mañana su declaración en la comisaría de la Ertzaintza en Ondarreta. A su salida, visiblemente emocionados y abatidos por la pérdida de su amigo, eludieron hacer ningún tipo de comentario.

La Ertzaintza tiene abierta una investigación para esclarecer lo sucedido. Hasta el momento son tres, dos hombres y una mujer, las personas detenidas por su presunta implicación en los hechos.