Investigan los malos tratos en una escuela de 0 a 3 años de Ribadesella

El pasado día 24, un extrabajador de la escuela de 0 a 3 años de Ribadesella denunció el pasado 11 de diciembre ante la Guardia Civil un posible caso de malos tratos, vejaciones y desatenciones continuadas a un grupo de niños por parte de dos profesoras. Semanas antes ya había puesto en conocimiento del concejal de Educación, Pablo García, los hechos, ya que el Ayuntamiento es el propietario de la escuela y de su gestión.

En su escrito ante el instituto armado, el denunciado advertía de que «cuando los niños están alterados la solución es atarlos con arnés a las hamacas del suelo y a las tronas por espacios largos de tiempo (unos 30 minutos) como forma de castigo». Otro «correctivo», detallaba en su denuncia el extrabajador de la escuela, sería «aislarlos en el baño o el comedor». Según la denuncia, otro castigo consiste en «subirlos al alféizar exterior de las ventanas del patio para que se tranquilicen cuando están alterados». Todas estas supuestas irregularidades van acompañadas de distintas fotografías. En una de ellas se puede ver, incluso, a una de las profesoras demandas atendiendo a su teléfono móvil mientras un niño está sentado en el aféizar.

El denunciante explicaba que puso en conocimiento de estos hechos al concejal de Educación, Pablo García, quien «me dijo que tenía mucho trabajo y que intentaría arreglarlo para el inicio de año». En declaraciones a EL COMERCIO publicadas este mismo domingo, desde el Ayuntamiento se afirmó que estaba abierta una investigación para tratar de esclarecer los hechos denunciados.

A esta investigación se abre la que ya ha abierto el Principado. Aunque la escuela es de titularidad municipal, la normativa recoge que es el servicio de Inspección el que debe velar por el buen funcionamiento del sistema educativo. La consejera de Educación, Lydia Espina, afirmó ayer que tuvo conocimiento de los hechos denuncias tras a publicación de la noticia en EL COMERCIO y que pidió de inmediato la apertura de una investigación. El servicio de Inspección envió a un inspector el martes a Ribadesella para entrevistarse con los responsables de la escuela y esclarecer los hechos denunciados. Espina está a la espera de recibir el pertinente informe.

Sí pidió la consejera «máxima cautela» respecto a este asunto hasta que concluya la inspección. Dijo que trabaja codo con codo con el alcalde Ribadesella, Paulo García, con el fin de esclarecer los hechos denunciados por el extrabador de la escuela.