Urgente Grandes retenciones en la A-8 y el Txorierri, sentido Cantabria, por la avería de un camión
En el detalle, el joven Guillem Comamala. De fondo, el yate La luna, amarrado y precintado en el puerto de Cala Bona. EFE | G. Rubert

Una fiesta en el yate de un millonario alemán acaba en tragedia en Mallorca

Un joven mallorquín de 20 años fue arrollado mientras pescaba calamares, sin que nadie parara a socorrerlo

Sábado, 31 de agosto 2024, 09:46

Pescando calamares, junto a su tío y su primo de 13 años, el joven Guillem Comamala perdió la vida el pasado 23 de agosto en la costa este de Mallorca, a una milla del puerto de Cala Bona. Lo hizo de manera trágica, en lo que parecía una apacible noche más de verano en la isla, después de que la pequeña embarcación en la que se encontraba fuera embestida, por causas que se desconocen, por un lujoso yate de color negro, bautizado como 'La Luna'.

Publicidad

El joven, jugador de voleibol y excelente estudiante, estaba sentado junto al motor, que por el impacto se deshizo en mil pedazos, y cayó al agua, alcanzado por las hélices del yate, mientras sus familiares trataban de agarrar su cuerpo para que el mar no se lo llevara. La embarcación que causó el incidente abandonó el lugar, sin que ninguno de sus ocupantes se preocupara por lo ocurrido.

A bordo de la lujosa embarcación de 20 metros de eslora, según relata ABC, se encontraba Dennis Viehof, miembro de una de las familias más ricas de Alemania. Dennis, piloto de aviación germano de 35 años, estaba celebrando una fiesta con amigos y habían salido a navegar ese día desde la Costa de los Pinos hasta Portocristo, en el municipio mallorquín de Manacor, donde su padre tiene una lujosa finca.

Pese al fuerte impacto y a los gritos desconsolados del tío y el primo de Guillem, que acabaron con heridas leves y que trataron de alertar en un principio al yate cuando se les aproximaba «a toda velocidad», esta embarcación no se detuvo y continuó con su camino y con la celebración, tal y como han relatado. Las cámaras del puerto grabaron posteriormente a los ocupantes, después del atraque, con total normalidad. A la mañana siguiente el yate fue limpiado, borrando los rastros de la fiesta. La investigación trata de esclarecer si el patrón del yate y sus amigos ocultaron pruebas de forma intencionada y si se dieron cuenta del accidente. En tal caso podrían ser imputados por eludir su deber de socorro a la víctima.

La Guardia Civil, tras conocer lo sucedido, inició una búsqueda de la embarcación, hasta que localizó a 'La Luna' en el Club Náutico de Porto. Citaron a Viehof, en la Comandancia de Palma, y apareció con su abogado y un traductor, pero se negó a declarar, tras conocer que se le investigaba por un delito de homicidio imprudente. La defensa recalca que en ningún momento se dio cuenta de haber arrollado a la víctima, y que tampoco notaron el impacto. El patrón del barco también ha sido identificado, pero no ha habido ningún detenido.

Publicidad

Los vecinos en contra

Mientras, continúa la investigación para esclarecer, entre otras cosas, quién pilotaba el yate en el momento del accidente —no está claro que fuera el hijo del dueño de la embarcación y si la pequeña embarcación llevaba las luces reglamentarias. Ambos datos serán claves para determinar la responsabilidad de las partes. La defensa espera el atestado para saber en qué se basa la acusación. Si no se aclara quién tripulaba el yate, al acusado se le imputaría por responsabilidad civil y evitaría la vía penal. El presunto homicida ha regresado a su país, a la espera de prestar declaración en el juzgado de Manacor.

Los dos mujeres y tres hombres que acompañaban a Dennis Viehof han reconocido que consumieron bebidas alcohólicas a bordo, pero negaron que estuvieran borrachos. En su declaración, apoyaron la versión de la defensa asegurando que ninguno de ellos se percató del accidente y por eso regresaron al puerto de Porto Cristo.

Publicidad

La Policía también investiga un incidente que se produjo poco antes de que 'La Luna' arrollara el bote en Cala Bona cuando un tripulante del yate se puso a pilotar de forma temeraria la lancha auxiliar del yate acosando a otra pequeña embarcación con dos menores a bordo. Cuando los padres de los chicos les recriminaron su comportamiento, pudieron apreciar que «todos estaban muy borrachos».

Este hombre, dueño de una empresa de aviones chárter, se hacía llamar 'PilotDennis' en las redes sociales, antes de cerrar todas sus cuentas para evitar que tras este caso salgan publicadas imágenes suyas anteriores. Su padre, Klaus Viehof, es propietario de la mayor sala de esquí cubierta de Europa, y tiene a su nombre también negocios inmobiliarios y de construcción en España, concretamente en Mallorca. Su abuelo, además, Eugen Viehof, fue el fundador de los grandes almacenes Allkauf, por cuya venta su familia se embolsó una fortuna.

Publicidad

Este incidente ha dejado profundamente consternada a la isla balear. Guillem, según resaltan quienes le conocían, era una promesa del voleibol y hace dos años se había proclamado ganador de la Olimpiada Balear Matemática. Las redes sociales se han llenado de mensajes de rabia por lo ocurrido y muchos han llegado a pedir que no se permita a esta millonaria familia volver a pisar Mallorca. La Policía también investiga otro incidente previo a este, cuando un tripulante del yate se puso a pilotar de manera peligrosa la lancha auxiliar acercándose de manera temeraria a una pequeña embarcación.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad