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El final de la pandemia ha ido reduciendo paulatinamente las medidas de protección personales. Primero fueron las limitaciones de aforo y la distancia de seguridad las que fueron desapareciendo de nuestras vidas, y ahora son las mascarillas las que parece que tienen los días contados. ... Tampoco parece que haya ya demasiado interés por vacunarse. Según los datos que ha hecho públicos el Departamento de Salud la mañana de este lunes, el 59,8% de la ciudadanía vasca no se ha puesto la segunda dosis de refuerzo.
Osakidetza ha actualizado las cifras de vacunados para constatar la tendencia a la baja de la protección. El 92,9% de la población cuenta con la «inmunización completa», el primer ciclo de vacunación, mientras que la cifra de quienes han recibido la primera dosis de refuerzo bajó al 77,4%. La segunda directamente se la ha puesto únicamente el 40,2% de la ciudadanía.
Vaya por delante que la vacunación nunca ha sido obligatoria, aunque en sus inicios fue requerida, por ejemplo, para salir del país, y que las dosis del covid no se incluyen en el calendario de vacunación. Y aunque Osakidetza ofrece citas a todos los grupos de edad cuando ha pasado el tiempo correspondiente desde el pinchazo anterior, actualmente la Comisión de Salud Pública tiene señalada como «población diana» a la que recomienda vacunarse únicamente a personas mayores de 60, enfermos crónicos, inmunodeprimidos y embarazadas.
El mensaje parece haber calado a medias, porque apenas el 54% de los residentes en Euskadi de entre 60 y 69 años se han puesto el segundo refuerzo. La cifra crece en los siguientes tramos de edad, hasta alcanzar el 84% en los mayores de 80 y el 90% en los que superan los 90. Pero se desploma en los grupos más jóvenes hasta tocar suelo entre los chavales de entre 18 y 29 años: solo el 7,2% han recibido el pinchazo. Un poco menos que en el tramo 30-39 (11,1%) y el 40-49 (14,2%). De 50 a 59 la cifra se eleva hasta un 21,2%.
El balance no incluye a los menores de edad, un tramo con el que la vacunación nunca tuvo especial éxito. Por poner un ejemplo, la dosis pediátrica remitida por Pfizer es de largo la menos suministrada en el territorio: se han inoculado el 80,4% de los viales adquiridos, 144.000 de 180.000. En el resto de marcas, las destinadas a adultos, la cifra oscila entre el 145% de Moderna -del que se tuvieron que adquirir más vacunas de las esperadas- y el 98% de Janssen.
El boletín de Osakidetza, que en la época más dura de la pandemia se llegó a actualizar diariamente, también actualiza la cifra de fallecidos a causa del virus. El covid ha matado en Euskadi a 8.685 personas, de las que 673 han perdido la vida durante los últimos nueve meses. Fue en octubre del año pasado cuando se superó la barrera de los 8.000 fallecidos.
¿Qué significa esto? Que aunque el covid ha dejado de hacer estragos, es un virus que ha llegado para quedarse y si gue ahí. Actualmente hay 31 personas hospitalizadas a causa de la enfermedad en los centros de Osakidetza, una de ellas en Ciudadados Intensivos. Las UCI vascas llegaron a quedase sin pacientes con covid durante unos pocos días hace unas semanas, pero fue puntual. La tendencia es que haya entre tres y cuatro afectados en estado grave.
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