Así ha sido la última evolución de los indicadores de la pandemia en Euskadi

6,1%. La positividad, el porcentaje de pruebas diagnósticas que arroja un resultado positivo, encadena tres jornadas por encima del umbral del 4%; el nivel que establece la OMS para alertar de la existencia de alta transmisión comunitaria. Esta tasa se ha duplicado en muy poco tiempo. El día 22 quedó fijada en el 2,8%; el 24 se disparó puntualmente hasta el 4,1%, mientras que el 30 volvió a superar la barrera del 5%.

1,41. Otro de los parámetros analizados por los expertos para anticipar tendencias es el índice R0. El número reproductivo básico muestra unos preocupantes síntomas de empeoramiento desde hace más de una semana. Este indicador, que determina las infecciones que genera a su vez cada caso confirmado, lleva ocho días seguidos por encima de 1. En Gipuzkoa, se ha disparado hasta 1,64. En Bizkaia, se sitúa en 1,33 y en Álava, en 1,12.

132,65. Hace apenas una semana, Euskadi suspiraba por seguir reduciendo su incidencia acumulada en catorce días y bajar por fin de la barrera de los 100 casos por cada 100.000 habitantes. El objetivo estaba al alcance de la mano. El 24 de junio, la tasa se quedó en 105,56. Al cabo de dos días, descendió hasta 103,33. El cambio de rumbo de la pandemia se reveló el día 27. Desde entonces, la incidencia ha crecido a diario.

1.132,61. Para analizar este nuevo repunte de la pandemia, es preciso poner la lupa sobre el nivel de contagio en la franja de edad de 17 y 18 años; un grupo de población que aún no ha sido vacunado. La tasa de incidencia acumulada a 14 días y por 100.000 habitantes supera ampliamente el millar de casos: 1.132,61. Ha escalado 155 puntos en una sola jornada y nada menos que 622 desde el 24 de junio, fiesta de San Juan