Salud «dejará de hacer test a contactos asintomáticos» si hay riesgo de colapso

Así se recoge en la última revisión de protocolos frente al coronavirus publicada por Osakidetza el 31 de diciembre. En ella se incluye un documento llamado 'Plan de medidas urgentes para la vigilancia y control de casos y contactos COVID-19 en situación de transmisión comunitaria extrema'. En él se incluyen las modificaciones que explicó la consejera de Salud el pasado martes. La principal, que se «dará prioridad absoluta al diagnóstico y seguimiento» de los «casos sintomáticos» por parte de la Atención Primaria. En especial a los que presenten cuadros «moderados o graves» o pertenezcan a grupos de riesgo (mayores, embarazadas, inmunodeprimidos y no vacunados).

Pero hay un aspecto que Gotzone Sagardui no indicó y que se recoge al inicio del protocolo. «Cuando la capacidad diagnóstica y de recursos humanos para el seguimiento de los anteriores (casos sintomáticos moderados, graves o de riesgo) se vea comprometida, se dejarán de realizar pruebas diagnósticas a contactos asintomáticos». Es decir, Osakidetza dejará de hacer test a posibles infectados sin signos de la enfermedad cuando su capacidad no dé más de sí.

El propio Servicio de Salud deberá hacer pública esta situación. Según recoge el protocolo, «se avisará a la población en el momento en que no haya capacidad de seguimiento a contactos asintomáticos para que los contactos vacunados extremen las medidas de precaución y realicen observación de sus síntomas y los no vacunados hagan cuarentena».

Osakidetza insiste en que con esta medida de emergencia lo que busca es centrarse en los positivos realmente importantes. Aquellos que comienzan a presentar cuadros moderados que se pueden complicar y acabar necesitando atención hospitalaria. También de los cuatro colectivos más vulnerables al virus, como son los mayores de 70 años, mujeres gestantes, personas con pocas o sin defensas y los no vacunados.

Ellos tienen también prioridad en el nuevo protocolo para que Osakidetza les realice cuanto antes una prueba diagnóstica en caso de sospecha de estar contagiados, bien porque tengan indicios de la enfermedad o porque sean contacto estrecho de un positivo. En su caso se optará por una PCR.

En los últimos escalones para que les citen para un test está la población general «con síntomas leves que contacte vía web o telefónica» y «el resto de asintomáticos». A estos se les realizará una prueba de antígenos. Solo si dan negativo y Osakidetza considera que hay una alta sospecha de infección por covid, se les someterá a una segunda prueba, en este caso una PCR.

Las personas infectadas están recibiendo ya un SMS con un enlace a la web de Salud en la que se les dan «instrucciones de autoobservación, aislamiento y síntomas de alarma, así como consejos para el manejo de la sintomatología leve». ¿Cuáles son los indicios de alarma? El protocolo detalla los siguientes: dificultad para respirar, dolor o presión persistente en el pecho, confusión o incapacidad para permanecer despierto, fiebre superior a 38 grados durante más de cinco días, o su reaparición si había remitido, y piel, labios o lechos de las uñas pálidos, grises o azulados.