el correo
Jueves, 17 de diciembre 2020, 14:05
España se convertirá en el cuarto de Europa, detrás de Holanda, Bélgica y Luxemburgo, y en el sexto del mundo que permite poner fin a la vida con la intervención de un profesional de la salud en caso de enfermedad incurable, grave, crónica e ... invalidante.
Publicidad
En abril de 2002 Holanda se convirtió en el primer país del mundo en legalizar la eutanasia. Poco después, Bélgica y Luxemburgo siguieron el camino que habían tomado sus vecinos. En Holanda se aplica a enfermos con dolor insoportable e irreversible y es el paciente quien debe pedirla a su médico, que está obligado a consultar con otro antes de decidir.
Bélgica tiene una ley similar. Tampoco hay un control previo y solo se necesita el visto bueno de dos médicos. A diferencia de la ley holandesa, la eutanasia puede aplicarse a cualquier edad, mediando consentimiento paterno, y también incluye casos de sufrimiento psíquico irremediable.
Más recientemente, Colombia y Canadá ampararon esta práctica en su legislación, aunque cada norma recoge sus propios matices. Algunos países europeos han llevado recientemente a votación su regulación, como Portugal, donde en mayo de 2018 se intentó, sin éxito, aprobar una ley al respecto.
Por el momento no hay más países que despenalicen en su totalidad la eutanasia. Sí hay lugares en los que se permite el suicidio médicamente asistido que, a diferencia de la eutanasia, no requiere de una intervención directa de los médicos. Estos únicamente suministran los medios necesarios y es el paciente quien se toma la medicación voluntariamente para terminar con su vida. Es el caso de Suiza, donde no se contempla castigo para quienes ayuden a otro a morir, siempre y cuando sea por razones altruistas.
Publicidad
Suiza permite el suicidio asistido desde los años cuarenta del siglo pasado. De aquí se deriva la existencia de organizaciones que ayudan a extranjeros procedentes de Italia, Francia o España a gestionar sus peticiones para «morir dignamente».
En Estados Unidos, la eutanasia es ilegal, pero en algunos de sus estados, como California y Montana, dejan abierta las puertas a la muerte asistida en pacientes terminales. De la misma manera, en Washington, Oregon y Vermont se contempla el suicidio asistido basándose en el fundamento legal que reconoce «el derecho a decidir de las personas».
Publicidad
Lo que no se permite en Suiza, Alemania o Austria es la eutanasia activa, pero sí indirecta o pasiva, siempre y cuando el enfermo haya expresado esa voluntad. La eutanasia pasiva, cuando se consigue la muerte del paciente en situación irreversible suspendiendo el tratamiento médico, está reconocida bajo ciertas condiciones en las legislaciones de Suecia, Noruega, Dinamarca y Finlandia.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.