Las llamadas para animar a la vacunación con la cuarta dosis no cuajan en Euskadi

En los últimos siete días se han inoculado 7.011 segundas vacunas de refuerzo, una de las cifra más baja desde que se abrió esta campaña a comienzos de octubre. Solo en la semana del puente de diciembre se pincharon menos sueros. Eso sí, entonces únicamente podía recibir el preparado la población general mayor de 60 años. Y para esas fechas muchos de los que tenían interés en vacunarse, y por edad podían hacerlo, ya contaban con la profilaxis.

Parece que la situación que vive China, con una gran explosión de casos en las últimas semanas, no anima a una parte importante de los vascos a vacunarse de nuevo contra el coronavirus. Al menos, no por el momento. De la generación de 50 a 59 años solo el 8,8% cuenta hasta el momento con la cuarta dosis. En cambio el 84% de las personas de esta franja de edad sí se puso la tercera. Con los de 40 a 49 ocurre algo muy similar. Solo tienen esta segunda dosis de refuerzo el 5,2% frente al 65% que se puso el preparado anterior hace ahora justo un año.

Hay que tener en cuenta en estos datos que una parte importante de los menores de 60 años que están ya vacunados son personal sanitario o sociosanitario, colectivos a los que ya se les ofreció ya el pasado otoño la posibilidad de vacunarse de forma conjunta de la gripe y del covid. También han recibido el preparado las personas inmunodeprimidas.

Está por ver si, una vez finalicen las fiestas navideñas, la campaña de vacunación de la cuarta dosis se reactiva. Hay organizaciones sanitarias que no ofrecen cita antes del 9 de enero, una vez sus centros de salud recuperen su horario habitual con la incorporación de toda la plantilla tras las vacaciones. Esto es algo que ocurre por ejemplo en la de Bilbao-Basurto.

Detrás de estos bajos datos de vacunación comparados con los registrados con los anteriores preparados está que una parte de la población ha perdido el miedo a un virus que desde la llegada de la variante ómicron, aunque es más infeccioso, ha reducido su gravedad. A esto se suma que durante estos casi tres años de pandemia un porcentaje importante de la ciudadanía vasca se ha contagiado, al menos, una vez de coronavirus. La mayoría han pasado la enfermedad de forma leve y esto puede influir en que tengan ahora un interés menor en vacunarse de nuevo.

Por otro lado los indicadores de la evolución de la pandemia en Euskadi muestran una ligera mejora con respecto a la pasada semana. El patógeno está detrás de la muerte de 17 personas en la última semana, una menos que en la anterior. En los hospitales a primera hora de ayer atendían en planta a 165 personas con una infección activa de covid frente a las 171 del lunes precedente. En las UCI trataban a 11 pacientes en estado crítico a causa del virus. Hace siete días eran uno más.

El parámetro que muestra un descenso más claro es el de los contagios registrados por Osakidetza: 890 positivos frente a los 1.344 de la semana precedente. El descenso ha sido del 33,7% y refleja el retroceso del covid en Euskadi a la espera de si la situación que atraviesa China puede tener alguna incidencia sobre Europa en breve plazo.