Estos son los municipios de Euskadi que no podrán abrir sus bares y restaurantes hasta el viernes como pronto

En todos ellos, se supera la peligrosa tasa de 500 positivos por cada 100.000 habitantes. En el caso concreto de los municipios con menos de 5.000 habitantes -los cinco ayuntamientos alaveses y Zaldibia- se ha realizado una evaluación pormenorizada por parte de los expertos sanitarios del Ejecutivo autonómico para determinar el cierre de bares y restaurantes, ya que allí «uno o dos casos» pueden generar drásticos repuntes en la estadística.

Los actuales resultados del coronavirus siguen reflejando los efectos del escenario previo a la reapertura de la hostelería y la posibilidad de circular por el territorio histórico. Sin embargo, en el caso de Álava se observa un ligero repunte que empieza a preocupar a los responsables del Gobierno vasco, aunque el coordinador del Programa de Vigilancia y Control del Departamento de Salud, Ignacio Garitano, reconoció ayer que aún «no ha entrado en semáforo rojo». «Nos preocupa, evidentemente, pero hay que hacer un esfuerzo en intentar recordar que vivimos en un escenario de pandemia», subrayó el portavoz sanitario.

Y es que Álava se está comportando de una manera muy distinta al resto de Euskadi. «Ni subió tanto, ni bajó tanto» -analizan los expertos- como consecuencia de las medidas adoptadas por el consejo asesor de protección civil (LABI) que preside el lehendakari Iñigo Urkullu. «Los territorios se están comportando de una manera ligeramente diferente. La subida fue mucho más pronunciada en Gipuzkoa y Bizkaia, y de la misma manera ha sido la bajada tras la introducción del paquete de medidas», apuntó Garitano.

No existe una preocupación concreta por ninguno de los barrios de Vitoria -donde reside el 76% de los alaveses- ni los pequeños núcleos urbanos que abundan en el resto de la provincia. Si bien es cierto que ayer se inició un cribado entre los vecinos de Aramaio mayores de 6 años (1.483 vecinos) por, principalmente, su cercanía con Mondragón, donde la gran mayoría estudia, trabaja y hace la compra. De momento, no se baraja la posibilidad de realizar ninguna otra prueba masiva más en la provincia y el resto de Euskadi.

«Dos territorios van de la mano y Álava es un poco diferente. Sólo nos queda recordar que las aglomeraciones, independientemente que sean en un local hostelero, un domicilio particular o una quedada de amigos y, sobre todo, si se relajan las medidas pueden ser un elemento que lleve a mantener una cierta cantidad de casos», recordó Garitano.