Una mujer pasa por una carpa de emergencias contra el coronavirus en Lleida. EFE

Fase 2 'flexible', confinamientos domiciliarios... así luchan las comunidades contra los rebrotes

El uso obligatorio de las mascarillas en espacios cerrados y abiertos se extiende por casi toda la geografía española

Lunes, 13 de julio 2020

La lucha contra la pandemia del coronavirus no terminó con el fin del estado de alarma declarado el pasado 21 de junio. Se entraba así en lo que se llamó la 'nueva normalidad', en la que seguían vigentes normas de protección básicas para evitar ... nuevos contagios entre la población como el uso de mascarillas en recintos cerrados y en espacios abiertos donde fuera imposible mantener la distancia mínima de 1,5 metros. Casi un mes después, las medidas de seguridad adoptadas no han impedido la aparición de un centenar de nuevos rebrotes con más de 5.000 infectados en 16 de las 17 comunidades. Sólo se libra Asturias. De momento, son los gobiernos regionales y no el central los que deben apostar por el mejor plan para tratar de atajar los repuntes del virus en sus respectivos territorios. Estas son las distintas estrategias que están adoptando las comunidades autónomas para evitar volver a la casilla de salida del confinamiento decretado el pasado mes de marzo por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, que ya prepara un plan de reescalada para tutelarlas en la lucha contra los rebrotes y así evitar una segunda ola de contagios.

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  1. Fase 2 'flexible'

Es la opción elegida por el Gobierno de Aragón para luchar contra los rebrotes en Zaragoza y Huesca, y que incluye también a las cuatro comarcas de Cinca Medio, La Litera, Bajo Cinca y Bajo Aragón-Caspe. ¿Pero en qué se diferencia esta fase 2 'flexibilizada' de la adoptada hace meses por el Gobierno central? La principal diferencia es que en esta ocasión no se impide la movilidad entre municipios, que queda sujeta a la responsabilidad individual. Tampoco habrá franjas horarias por lo que los ciudadanos de todas las edades podrán salir a la calle en cualquier momento con total libertad.

Sin embargo, se adoptan otras medidas de seguridad bien conocidas por todos como limitar al 75% el aforo en terrazas con 10 personas como máximo por grupo. En los bares, que no podrán usar la barra, la ocupación disminuirá un 50%, además de prohibir el ocio nocturno y también se limitarán los asistentes a bodas y entierros. Además, los aforos serán del 75% en actos culturales, piscinas y centros de estudio.

  1. Confinamientos domiciliarios

Es la medida impuesta por el Gobern catalán para tratar de atajar el rebrote en la comarca del Segrià. Y todo ello desoyendo la resolución dictada en la madrugada del lunes por una juez de guardia por la que paralizaba el encierro domiciliario para la población de esta zona de Lleida. La polémica norma aprobada por el presidente de la Generalitat, Quim Torra, prohíbe las reuniones de más diez personas, las actividades de hostelería y restauración y las actividades culturales, de espectáculos culturales, de espectáculos públicos, recreativas, deportivas y de ocio nocturno.

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Asimismo, se han fijado restricciones para la entrada y salida a Lleida ciudad, Aitona, Alcarrás, La Granja de Escarp, Massalcoreig, Seròs, Soses, Torres de Segre y las entidades municipales de Sucs y Raimat. Antes, el Gobern adoptó unas medidas similares en Òdena (Barcelona), aunque no fue tan estricta en cuanto a la libertad de movimientos como la de Lleida, tal y como destaca el juez de guardia en su auto.

Ahora, los 160.000 vecinos de estas zonas deben «permanecer en su domicilio» excepto para trabajar, cuidar a niños o a personas mayores, ir al médico o comprar comida. Pese a la resolución judicial en contra, Torra no descarta adoptar la misma estategia para paliar la situación de contagios L'Hospitalet de Llobregat.

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  1. Confinamientos perimetrales

En Cataluña, se optó el pasado 4 de julio por esta estrategia para luchar contra el repunte de Segrià, en Barcelona. De esta forma, se restringe la libertad de movimientos de la población fuera de la localidad en cuestión, en el que se detectaron 351 casos entre sus 210.000 habitantes, salvo por motivos laborales y otras circunstancias de fuerza mayor durante dos semanas.

En la comarca gallega de A Mariña el cierre de su perímetro, que afectó a 70.000 habitantes de 14 ayuntamientos, duró sólo cinco días. En concreto, hasta la jornada de reflexión de las elecciones autonómicas celebradas este domingo. A partir de entonces se pudo volver a entrar y salir libremente de la zona de exclusión, con 128 contagios, que abarcaba también toda la costa de Lugo.

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  1. Limitación del aforo y horario en hostelería

Es una de las soluciones aprobadas por el Gobierno vasco para reducir el contagio en Ordizia. En concreto, se han reducido el aforo de bares al 50% y en las terrazas solo se puede estar sentado. Además, los establecimientos hosteleros sólo podrán permanecer abiertos los fines de semana hasta las dos de la madrugada. Estas medidas de prevención han sido también adoptadas por decisión propia por otros municipios cercanos como Beasain y Tolosa.

  1. Uso obligatorio de mascarillas

Es la medida para atajar la extensión de contagios mayormente adoptada por las comunidades autónomas. En los últimos días, ha tenido lugar un goteo constante de regiones que anunciaban el uso obligatorio de mascarillas en espacios abiertos y cerrados, independientemente de que se pueda guardar el metro y medio de distancia de seguridad, bajo la amenaza de sanciones que pueden alcanzar los 100 euros.

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Cataluña fue la primera comunidad en apostar por la utilización de esta prenda el pasado 9 de julio y 24 horas le seguía Baleares, Extremadura y Murcia y La Rioja. En el caso de Euskadi, sólo esta vigente en Ordizia, la localidad guipuzcoana afectada por un importante repunte de casos. Lo mismo sucede en Galicia con la comarca de A Mariña

Se espera que esta semana se sumen a la obligatoriedad de su uso Andalucía, Aragón, Navarra, Asturias y Cantabria. Eso sí, con algunas excepciones como cuando se haga deporte o cuando se coma o se beba en restaurantes y terrazas. En el caso de las playas y piscinas, el Gobierno andaluz, al contrario que otras comunidades más flexibles en cuanto a su permisividad, ha decidido obligar a la población a llevarlas aunque permite desprenderse de ellas cuando se bañen o cuando se esté comiendo. Eso sí, los expertos recomiendan que incluso se lleven puestas en reuniones con amigos y familiares dentro de las casas.

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