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Euskadi inicia hoy una nueva etapa. Estrena la versión más similar a la normalidad previa a la llegada del coronavirus. Vuelve la vida tal y ... como la conocimos, con pequeños matices y aún con mascarillas en los interiores, pero muy parecida a lo que era antes de marzo de 2020. Hoy ha decaído la Emergencia Sanitaria decretada por el Gobierno vasco para hacer frente a la sexta ola y con ella lo hacen también el grueso de las restricciones que aún permanecían vigentes.
Desde esta mañana es posible volver a tomar el café y el pincho de pie, apoyado en la barra del bar. Regresan las mesas de más de diez comensales a los restaurantes y el ocio nocturno volverá a ser precisamente eso, nocturno. Las discotecas podrán abrir hasta las seis de la madrugada y lo hacen sin ningún tipo de limitación. Deja de ser obligatorio el consumo de bebidas en mesa, lo que facilita que las pistas de baile se vuelvan a llenar como lo hacían hasta hace dos años.
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Los recintos culturales, deportivos y comerciales ya no tendrán que preocuparse por no sobrepasar el 60% de su capacidad, que permanecía establecido desde el 28 de diciembre como límite general. Podrán colgar el cartel de 'no hay entradas'. Y no porque no puedan vender más para respetar las directrices sanitarias, sino porque han completado todo el aforo.
Solo hay dos ámbitos en los que aún no se podrán llenar todas las localidades: los estadios de fútbol donde se disputan partidos de La Liga, caso de San Mamés y Mendizorroza, y los pabellones deportivos cerrados que acogen encuentros de la ACB, como Miribilla y el Buesa Arena. Los primeros pueden llenar el 85% de sus asientos. Los segundos, por ser cerrados, un poco menos, el 75%.
Estos límites fueron fijados en la última reunión del Consejo Interterritorial de Salud y están vigentes para todo el territorio nacional. La intención del Ministerio de Sanidad es que estos recintos recuperen su plena capacidad a partir del 1 de marzo.
La otra gran medida preventiva que se mantiene también afecta al conjunto de España y es la obligatoriedad de usar mascarilla en interiores. Desde el pasado jueves al aire libre solo se exige en los eventos multitudinarios en los que los asistentes estén de pie o sentados y no puedan guardar la distancia interpersonal de metro y medio con el resto de espectadores. Sanidad pide que se utilicen también cuando se produzcan aglomeraciones.
El Departamento de Salud también ha establecido una serie de recomendaciones para las citas donde se da una elevada presencia de personas. A través de una orde solicita a los ayuntamientos con una incidencia acumulada superior a 400 casos que suspendan aquellos actos en los que «prevean que no se puede garantizar el cumplimiento de las medidas preventivas» básicas. La directriz puede afectar al desfile del Carnaval de Bilbao. La decisión final sobre la celebración de estos eventos la toma cada consistorio.
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