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ane urdangarin
Lunes, 6 de julio 2020, 14:34
Sin descartar que se puedan emprender otras acciones, el brote de coronavirus detectado en Ordizia ya se ha traducido en las primeras restricciones en los servicios sociales de la comarca, a fin de «preservar el bienestar y la integridad» de usuarios y trabajadores. La ... Diputación de Gipuzkoa ha decidido «intensificar» las medidas de prevención, clausurando los centros de día de Ordizia, Beasain y Lazkao. Desde este lunes mantiene también suspendidas temporalmente las salidas de los mayores de las residencias de Arangoiti (Beasain), Txindoki (Lazkao), San Juan (Segura), Argixao (Zumarraga) y Santikutz (Legazpi).
De momento se podrá seguir realizando visitas a estos centros siempre que se extremen las normas de seguridad establecidas, salvo en el caso de Arangoiti y Txindoki, donde los encuentros con los residentes se han cancelado durante siete días. Además, las personas que viven en Ordizia, Beasain y Lazkao no podrán acudir a ver a sus familiares en la totalidad de la red de centros residenciales.
El Departamento foral de Políticas Sociales informó de estas disposiciones a través de un comunicado de prensa en el que la responsable del área, Maite Peña, recuerda que en estos momentos también está cerrada la residencia San José de Ordizia, en la que se están llevando a cabo trabajos de remodelación. Sus usuarias fueron trasladados provisionalmente a otros centros del entorno, en concreto a los ya citados Arangoiti, Txindoki y Argixao, además de Iurreamendi, en Tolosa, por lo que las salidas también quedan suspendidas en esta última residencia.
Asimismo, desde Políticas Sociales se está haciendo seguimiento del personal laboral residente en Ordizia que desempeña su labor en otros recursos y servicios fuera del municipio y de la comarca, con el objetivo de determinar si se deben tomar medidas adicionales.
La diputada foral, Maite Peña, comunicó este lunes estas medidas a los responsables de los centros residenciales y de día de la comarca del Goierri en el transcurso de una reunión de coordinación convocada como respuesta al rebrote de coronavirus localizado en Ordizia por el Departamento de Salud vasco. Maite Peña subrayó que en el caso de que exista una transmisión comunitaria del Covid-19, dado que los servicios sociales son parte de esa comunidad, «es indispensable extremar las medidas preventivas para anticiparnos lo máximo posible al avance de la enfermedad; que sabemos que es invisible, de transmisión rápida, y muy virulenta entre las personas más frágiles». La diputada defendió que «no podemos bajar la guardia» y que la detección y la respuesta rápida son «fundamentales» para atajar el avance del virus.
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