Los adolescentes vascos empiezan a fumar cada vez antes, a los 14 años

Larizgoitia ha alertado sobre los graves riesgos para la salud que tiene el tabaquismo. La ha situado como la principal causa de mortalidad en el mundo y, aunque no ha ofrecido datos concretos, ha indicado que «aproximadamente el 50% de las muertes en los países desarrollados está asociada con el tabaco», tanto directa como indirectamente por las enfermedades sobre las que tiene incidencia: desarrollo de varios tipos de cáncer, ictus, infartos, problemas respiratorios… Cifras que son extrapolables al País Vasco. La OMS estima que cada año mueren en el mundo 8 personas a causa del tabaco, de los que un millón son fumadores pasivos.

La directora de Salud Pública ha ofrecido estos datos durante la rueda de prensa que ha ofrecido el Departamento de Salud con motivo del Día Mundial Sin Tabaco. Allí ha explicado que uno de los objetivos que se marca la consejería para reducir el tabaquismo en los próximos años es disminuir la edad de inicio del consumo, porque «cada año que se retrase es un año ganado». Y es que ha recalcado que los cigarrillos tienen una serie de sustancias que enganchan y generan conductas adictivas. Cuando estas comienzan en la adolescencia es complicado desprenderse luego de ellas. «Es más difícil dejar de fumar cuanto antes se empieza con este hábito», ha asegurado Larizgoitia. Para reducir su consumo la medida más eficaz, ha apuntado, «es subir el precio».

Otra línea de acciones que está poniendo en marcha el Gobierno vasco para limitar la presencia del tabaco es dificultar su consumo en determinados lugares. Es lo que se conoce espacios sin humo. En Euskadi son ya 211 las zonas así marcadas, entre ellas playas, piscinas, parques infantiles, plazas, entornos naturales o espacios deportivos. Según la consejera Gotzone Sagardui, el número de zonas donde no son bienvenidos los fumadores ha aumentado un 45% el último año y se han sumado a la iniciativa 55 municipios. Sagardui ha incidido en que el objetivo de estos espacios sin humo son velar por la salud pública, promover conductas saludables y la concienciación social e individual.

Pero aunque sean declarados libres de humos en estos espacios no se prohibe fumar. La ley no lo impide ni hay sanciones para quienes se enciendan un cigarro. El no hacerlo queda a la buena voluntad de cada fumador.

Es una situación similar a la que se da en las terrazas hosteleras, donde numerosas entidades médicas piden que se vete también el tabaco. Preguntada por esta cuestión la consejera señaló al Gobierno central y dijo que «está pendiente la aprobación de un plan estatal de control de tabaquismo, en el que se plantea modificar la ley y prohibir fumar en las terrazas». Sagardui dijo sobre esta cuestión que en el Gobierno vasco están «a favor de las medidas que ayuden a cuidar de la salud», pero reiteró que por encima de medidas punitivas y restrictivas, en departamento apuesta por la «concienciación social e individual» para evitar el hábito tabáquico.

Sagardui se ha referido a la proliferación de nuevos dispositivos para fumar, como los vapeadores o las pipas de agua, y ha reclaclado que «no hay forma segura de consumir tabaco o nicotina». La consejera ha recordado que Osakidetza ofrece tratamientos a la población que quiere dejar de este hábito. El pasado año iniciaron estas terapias 4.158 personas. Son un 14,7% menos que las 4.929 que lo comenzaron en 2021.