Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Aunque Euskadi es la comunidad autónoma que más invierte por persona dependiente, también es la segunda con mayor limbo de dependencia. Es decir, con más ... personas con el derecho reconocido a recibir una prestación y que todavía no la han cobrado. Bizkaia, Álava y Gipuzkoa suman 81.460 dependientes, de los que 14.522 no reciben ninguna ayuda por su condición, lo que representa el 17,83% del total. Solo Cataluña, con el 26,06%, supera a los tres territorios vascos. Por la cola, en cambio, aparecen Castilla y León (0,14%), Aragón (0,89%) y Galicia (2,54%).
Los datos han sido facilitados este jueves por la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales, que reclama «simplificar los procedimientos y flexibilizar» las vías de acceso a estos servicios. De hecho, según explican, solo Aragón y Galicia cumplen el objetivo de reducir las listas de espera durante este año en un 25%, la cantidad prevista en el Plan de Choque en materia de dependencia 2023. Euskadi, de hecho, entre diciembre de 2022 y septiembre de 2023 la aumentó en un 4,77%.
Los datos llaman la atención por sí solos, pero resulta más preocupante cuando se comprueba que 1.346 vascos fallecieron entre el 1 de diciembre de 2022 y el 31 de mayo de 2023 a la espera de recibir una ayuda que tenían concedida (1.085 dependientes) o la valoración de dependencia (261 personas). Se trata así de la cuarta comunidad con más fallecidos en estas listas de espera, solo por detrás de Cataluña (6.183), Andalucía (5.304) y Valencia (1.813).
Así, en el conjunto de España, 123 personas fallecen al día en las listas de espera de la dependencia sin ser atendidas, lo que supone una cada 12 minutos. En el caso de Euskadi, son siete los muertos diarios que se registraron entre el 1 de diciembre del año pasado y el 31 de mayo.
Desde la Asociación Estatal de Directores y Gerentes en Servicios Sociales alertan de que nueve comunidades autónomas han recortado las partidas presupuestarias destinada a las personas dependientes. Destaca el caso de Cataluña, Andalucía o la Comunidad Valenciana, todas ellas con una recortes superiores a los 40 millones de euros.
Esta situación derivó en que la aportación del conjunto de las comunidades autónomas a la atención a la dependencia se redujera en 98 millones de euros el año pasado. Entre 2015 y 2020, el peso relativo de la financiación autonómica frente a la estatal representaba una tendencia alcista. Sin embargo, el incremento de la financiación aportada desde los Presupuestos Generales del Estado como plan de coche al coronavirus ha llevado a algunas comunidades autónomas a retirar parte de su financiación y «aliviar las arcas autonómicas en lugar de incrementar las ayudas a las personas dependientes», explican.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La segunda temporada de Memento Mori se estrenará este mes de abril
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.