Borrar
Un regreso irritante

Un regreso irritante

El sarampión alcanzó un pico alarmante en 2019. Mientras en África miles de niños fallecen por falta de acceso a la prevención, en Europa el movimiento antivacunas pone en riesgo la 'inmunidad del rebaño'

Inés Gallastegui

Granada

Martes, 14 de enero 2020, 01:18

La de 2019 fue una buena 'cosecha' para el virus del sarampión. A falta de los datos definitivos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertaba a finales de diciembre de que el ejercicio se cerraría con el récord de la década: el número de ... casos estimados en los once meses anteriores triplicó los casi 10 millones de 2018, por lo que las muertes podrían superar con mucho las 140.000 del año anterior. La enfermedad, más contagiosa que el ébola y la gripe, debía estar ya erradicada, según los planes de la OMS, pero la caída en las tasas de vacunación ha hecho que vuelva con fuerza. La paradoja es que, mientras en países como la República Democrática de Congo (RDC) más de 6.000 niños murieron porque la situación de pobreza y violencia complicó el acceso a la inmunización en centros sanitarios, en los países ricos el regreso de la infección se debe al auge de los movimientos antivacunas.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Un regreso irritante