«El porno violento es el referente educativo de nuestros hijos»

- ¿Acertó?

- Me quedé corto. La realidad ha superado con creces cualquier previsión.

- ¿Hablamos de sexo con nuestros hijos?

- No. Es algo incomprensible.

- Da mucha vergüenza...

- Cuando doy talleres para familias, les digo que el dilema es que o educan a sus hijos o el porno lo hará por ellos. No hay otra. Así que tendrán que ponerse las pilas.

- ¿A qué edad se empieza a consumir porno?

- Algunos a los seis años porque los chavales no buscan el porno; el porno les busca a ellos. A los doce ya lo han consumido la mayoría; a los 16, el 70%; y a los veinte probablemente no haya ningún chaval que no haya visto porno. Un estudio del Gobierno francés dice que el 90% de esos vídeos son violentos. El porno violento es el referente educativo de buena parte de nuestros menores.

- ¿Por qué ese componente de violencia?

- Porque genera morbo. Y porque los adictos al porno necesitan cada vez contenidos más violentos. Es una característica de las adicciones.

- ¿Hay diferencias entre chicos y chicas?

- Sí, los chicos lo consumen mucho más. Pero las chicas son las que se van a comer el marrón.

- ¿Por qué?

- Porque van a acabar enamoradas de un chico que ha visto mucho porno y que le va a imponer las conductas sexuales que a él le excitan.

- ¿Y qué hacemos?

- El porno nos lleva años de ventaja. No podemos dejar la educación sexual de nuestros hijos en manos del porno violento porque afecta a su futuro sexual y afectivo y también reduce la empatía.

- ¿A qué se refiere?

- Estos días hemos conocido que unos chavales agredieron sexualmente a una compañera discapacitada. Es terrible. Esos adolescentes carecen de empatía.

- ¿Cree que esos casos irán a más?

- Sí, porque nadie pone remedio. Hay que hacerle competencia al porno con formación de familias, de profesores, de profesionales de la salud. Y luego que ellos hagan educación sexual con los más pequeños.