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Dos surfistas han obligado esta mañana a movilizar recursos policiales por tierra, mar y aire después de que decidiesen meterse al agua en la playa de Arrigunaga para coger unas olas, saltándose así las prohibiciones impuestas por la alerta sanitaria.
Fuentes de la Ertzaintza confirmaron a EL CORREO que se utilizaron un barco y un helicóptero de la Policía vasca, pero que finalmente no se logró localizar a los dos sujetos, que se enfrentaban a una sanción de unos 600 euros.
Según algunos vecinos de la zona, los dos jóvenes se metieron al agua en torno a las diez de la mañana. Como una hora después fueron descubiertos por una patrulla que se encontraba por las inmediaciones. Los agentes esperaron fuera de la playa a que saliesen. Los chicos trataron entonces de salir por una zona rocosa, lejos de la playa, para esquivar a los ertzainas.
Fue entonces cuando se movilizó a un barco de la sección marítima y a un helicóptero. Sin embargo, estos recursos no consiguieron localizarles. Cuando llegaron ya se habían marchado y se libraron de la sanción.
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