Noche de incidentes en Portugalete y el pinar de Gorliz con más lanzamientos de botellas contra la Ertzaintza

Además, en la zona de la Basílica de Santa María, la policía municipal tuvo que acudir hasta en dos ocasiones a disolver a un grupo de jóvenes que estaba de botellón, informa Marina León. Según la versión del Consistorio, los agentes que acudieron contabilizaron hasta cuarenta individuos. Eso sí, no sufrieron ningún ataca, y en la segunda ocasión que se presentaron, tras ser avisados, la cuadrilla ya se había disuelto.

En el pinar de Gorliz, lugar muy conflictivo cada fin de semana durante este verano por los botellones, los altercados han sido más graves. Sobre las dos y media, un grupo de jóvenes se ha enfrentado a varios recursos de la Brigada Móvil de la Ertzaintza y algunas patrullas que se encontraban en un operativo preventivo para evitar la celebración de fiestas en la demarcación de la Ertzainetxea de Getxo.

Cuatro personas han sido identificadas por su presunta implicación en el lanzamiento de piedras y objetos contra los agentes, y se les abrirá las correspondientes diligencias por desórdenes públicos y atentado contra la autoridad. No es la primera vez que se ven imágenes similares en esta zona de la localidad de la margen derecha. Durante los últimos meses, diferentes grupos de chavales se han reunido en ella para beber y ha habido un goteo de peleas que tienen preocupados a los vecinos y a las autoridades.

En Gipuzkoa la noche también ha sido movida en varios puntos. Patrullas de la Guardia Municipal donostiarra que vigilaban las calles han sufrido el lanzamiento de vasos y botellas mientras acudían a un incidente en la Plaza Trinidad de la Parte Vieja de San Sebastián. Durante estos incidentes se ha producido un enfrentamiento entre dos grupos de personas donde una de ellas ha sufrido heridas en una mano. La actuación de varias patrullas de la Ertzaintza ha conseguido disolver los enfrentamientos y desalojar a los alborotadores.

Fuera de la capital guipuzcoana, a la una y veinte de esta madrugada, un ertzaina ha sufrido una herida en la cabeza al recibir el lanzamiento de una lata de cerveza cuando patrullaba en un vehículo policial por Azkoitia. El presunto agresor no ha podido ser localizado, ya que ha abandonado rápidamente el lugar escondiéndose entre la muchedumbre. Por último, vecinos de Deba alertaban, a las cuatro menos cuarto de esta madrugada, de la celebración de un botellón en la playa de la localidad. Recursos policiales se trasladaban al lugar y procedían a informar por megafonía del incumplimiento de las medidas establecidas.

Los ataques a la Ertzaintza cuando acuden a disolver aglomeraciones y botellones se llevan repitiendo desde hace meses. La situación preocupa a los mandos de la Policía vasca y el sindicato ERNE ha pedido que se tomen cartas en el asunto. De hecho, la central ha solicitado hasta la intervención del propio ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska.

Hace solo una semana, los agentes tuvieron que enfrentarse a otros actos de violencia en Lekeitio al ir a disolver a jóvenes concentrado bebiendo. Pero antes les ha ocurrido en otros municipos vizcaínos, como Sopela o Plentzia. Estas situaciones suponen un auténtico reto para la Ertzaintza puesto que, a menudo, son cuadrillas muy numerosas y con individuos borrachos a las que no se puede responder, según fuentes sindicales.