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Javier peñalba
Viernes, 26 de abril 2019
El juez de Guardia de San Sebastián decidió ayer devolver a comisaría a los siete jóvenes detenidos por su presunta participación de la agresión sufrida por el menor de 17 años que permanece en estado muy grave en el Hospital Universitario Donostia. Lo hizo sin ... haberles tomado declaración. La decisión del magistrado fue acordada cuando los investigados se encontraban ya en la sede judicial, después que fueran conducidos en coches patrulla desde la comisaría de Ondarreta. Los arrestados, según fuentes consultadas, serán trasladados hoy nuevamente hasta el Juzgado de Guardia para prestar declaración. Mientras tanto, el menor herido continúa ingresado la Unidad de Cuidados Intensivos del citado centro sanitario. Su estado sigue siendo muy grave y permanece en coma profundo.
Los arrestados, que ya han pasado dos noches en los calabozos de la comisaría de la Ertzaintza de Ondarreta fueron conducidos a media tarde ayer al Palacio de Justicia. Llegaron cada uno a bordo de un vehículo patrulla. Las unidades accedieron a los sótanos de los juzgados del paseo de Duque de Mandas y seguidamente fueron conducidos hasta las celdas para detenidos, donde permanecieron hasta bien entrada la tarde cuando les fue comunicado que retornaba a las dependencias policiales. A las puertas del Juzgado de Guardia se fueron congregando familiares de los sospechosos, residentes en la comarca del Bidasoa. Sus edades oscilan entre 18 y 25 años y pertenecen a varias nacionalidades, entre ellas española, rumana, argelina y marroquí. La representación de allegados era tan nutrida que el juez encargado del caso se dio la vuelta cuando de manera decidida se dirigía a la guardia. Al ver a los familiares, optó por acceder al interior por otra entrada.
Los siete acusados están representados por un total de cuatro de letrados que pudieron entrevistarse con los encausados en los calabozos del juzgado. Según ha podido saber este periódico, tres de ellos, ambos de ascendencia rumana, negaron a su letrado Juan Ramón Zubillaga, su implicación en la que agresión sufrida por el menor. Estos, habrían reconocido que se encontraban en las inmediaciones, pero que en ningún momento golpearon al joven donostiarra. En este sentido, precisaron a su abogado, que intentaron separar a las personas enzarzadas en el altercado. Asimismo, habrían manifestado que los portero de una discoteca próxima al lugar en el que se produjeron los hechos podrían confirmar la versión exculpatoria que ofrecen. La defensa confía en que la versión que ofrecen sus clientes pueda quedar corroborada en el transcurso de las declaraciones que, muy probablemente, se prestarán hoy por la mañana ante la autoridad judicial.
Los hechos que han dado lugar a este procedimiento tuvieron lugar sobre las cinco de la madrugada del viernes en la calle Ijentea, frente a la entrada del Real Club Náutico donostiarra, en un lateral del Ayuntamiento donostiarra. El menor se encontraba en el momento del suceso acompañado de dos amigos, entre ellos un hermano mayor que él, con los que anteriormente había estado en la discoteca cercana. La víctima se vio involucrada en un altercado después de que supuestamente uno o varios miembros del grupo de los agresores pretendiera arrebatarle unos cigarrillos. Se cree que la resistencia del menor a entregarles el tabaco dio lugar a un altercado posterior, en el transcurso del cual la víctima recibió diversos golpes que le hicieron caer al suelo. En los instantes posteriores, mientras el menor permanecía tendido en la acera, fue objeto de nuevas agresiones mediante patadas.
El chico fue atendido en el mismo escenario de los hechos por miembros de una ambulancia medicalizada. Los sanitarios se encontraron con un joven en situación de parada cardiorrespiratoria, por lo que iniciaron las maniobras de reanimación. Estas se prolongaron cerca de tres cuartos de horas hasta que, una vez estabilizado, fue traslado al Hospital Donostia. Anoche el menor continuaba ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos. Permanece en coma profundo, en estado muy grave.
Fuentes medicas consultas reconoce que los casi cuarenta y cinco minutos que el chico permaneció en situación de parada cardiorrespiratoria podría haberle causado lesiones cerebrales difíciles de revertir
La secuencia de la agresión quedó grabada en cámaras de seguridad pertenecientes al Ayuntamiento de San Sebastián. En la zona hay dos dispositivos, que cubren el tramo de acera existente entre uno de los laterales del edificio consistorial y el Real Club Náutico. Según ha podido saber este periódico, el vídeo muestra la agresión que se produjo frente la puerta de Náutico así como la caída del menor al suelo y los golpes que recibe cuando permanece sobre tendido sobre la acera. La Ertzaintza tiene en sus manos la grabación que ha sido incorporada a las diligencias que agentes del equipo de investigación trasladaron al juez.
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