Junto al proceso de redacción y tramitación de la reforma de la Ley de Garantía de Ingresos, el departamento que dirige Idoia Mendia ya trabaja en una nueva Ley del Sistema Vasco de Empleo, que podría ver la luz el año que viene, y ... en un plan de transformación profunda de Lanbide -el Inem vasco-. «Son tres piezas de un mismo puzle y el éxito de una depende del resto», explica la vicelehendakari y consejera de Trabajo y Empleo.
Publicidad
Lanbide y sus profesionales son los encargados de atender las peticiones de acceso a la RGI, gestionar los expedientes y hacer un seguimiento de los casos. Una tarea que, en muchas ocasiones, genera una ingente burocracia que ralentiza el resto de tareas que tiene que atender este servicio.
De ahí que uno de los objetivos de la nueva RGI sea agilizar y hacer más flexible y eficaz la gestión de las ayudas para evitar los cuellos de botella y el colapso del sistema. Los responsables de Lanbide ya tienen previsto crear dentro de su organigrama una nueva dirección general que se hará cargo de todo lo relacionado con las prestaciones para liberar así de esa tarea al resto de funcionarios.
Además, la informatización y digitalización de muchos procesos permitirá liberar recursos humanos -ahora reservados a tareas meramente burocráticas- que podrán ser destinados, por ejemplo, a tareas de control y vigilancia dentro de la unidad de inspección que la ley prevé crear.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.