Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
El bono social térmico fue una medida puesta en marcha en 2018 por el Gobierno central como medida urgente para la transición energética y la protección de los consumidores. Pretende paliar la pobreza energética en hogares vulnerables, con ayudas para el pago de las facturas ... de energía destinada a calefacción, agua caliente sanitaria y cocina. Aunque el dinero procede de los Presupuestos Generales del Estado, las comunidades autónomas son las que se encargan de repartir los fondos. A Euskadi, entre 2020 y 2023, han llegado 45,8 millones de euros. Sin embargo, más de 2 millones no se han entregado a las familias necesitadas por «errores» en sus datos.
La consejera de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico, Nerea Melgosa, ofrece esa aclaración a una serie de preguntas relacionadas con esta prestación formuladas por el PP en el Parlamento vasco. Y solo el pasado año, cuando 52.645 hogares cobraron esta ayuda, quedaron fuera 2.459 familias con necesidad. La titular del departamento detalla que, pese a que se trata de ayudas directas, con unos beneficiarios claros, hay un remanente de más de 2 millones de euros sin gastar. 262.000 corresponden al año 2021, otros 1,27 millones a 2022 y 541.000 euros a 2023.
Melgosa explica que, en algunos casos, no han podido proceder a materializar los pagos porque «los datos de las personas beneficiaras», como por ejemplo «números de cuenta y direcciones» que han recibido «del Ministerio (para la Transición Ecológica) y de las compañías eléctricas no han sido correctos». En el departamento insisten, en ese sentido, que ellos son «meros intermediadores».
La ayuda se abona en un pago único en la cuenta en la que la persona beneficiaria tiene domiciliada la factura eléctrica. Las compañías son quienes informan al Gobierno central de los consumidores vulnerables, que no tienen normalmente que hacer ningún trámite. Sí que reciben una carta de comunicación en su domicilio en la que se les informa de la ayuda que les corresponde, documento que conviene revisar para comprobar que sus datos son correctos y poder comunicar cualquier cambio.
Este año, por el abaratamiento de la energía, la aportación económica se ha reducido y oscila entre los 135,55 y los 413,88 euros al año, dependiendo de la situación de vulnerabilidad y de las condiciones climáticas de cada municipio. Se trata de importes que se abonan a año vencido, por lo que corresponden a aquellos que tenían una situación de necesidad en 2023.
El año pasado, cuando se pagaban las ayudas de 2022, las cuantías iban de los 262,25 a los 797,22 euros, mucho más elevadas para hacer frente a las consecuencias derivadas de la invasión de Ucrania. El presupuesto para ese ejercicio, de hecho, ascendió a 20,6 millones de euros, frente a los 11,9 de 2023 y los 9,5 de 2021.
El 2022 es el último año, además, con datos definitivos tanto sobre las personas beneficiarias como sobre el importe total abonado, ya que en el caso del 2023 «se están acabando de realizar los pagos». Así, llegaron a 48.326 hogares vascos ayudas por valor de casi 20,7 millones de euros.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.