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Euskadi es una de las comunidades con menos invitados

Euskadi es una de las comunidades con menos invitados

También es, según un estudio que analiza las tendencias a nivel nacional, una en la que más gasto por invitado tienen las parejas

A. C.

Domingo, 28 de julio 2024, 00:52

Existe una suerte de frontera en lo que a bodas se refiere. La mitad sur del país se caracteriza porque asisten a los enlaces más invitados; la mitad norte, porque son más caras. Es una de las conclusiones del 'Libro imprescindible de las bodas', elaborado por Bodas.net, plataforma referente del sector nupcial; el profesor de Esade Carles Torrecilla y Google. Y Euskadi se ajusta a las normas de esa muga imaginaria. Es una de las comunidades en las que menos allegados acuden a las celebraciones, pero también se encuentra entre las que más gasto promedio afrontan los novios por cada asistente.

De acuerdo a la última edición del citado informe, a las parejas vascas las acompañan en su gran día unas 95 personas -la media nacional son 117- , las mismas que en Galicia. Solo en Navarra y Baleares (con 93 cada una), Asturias (con 91) y Cataluña y Cantabria (con 81) van menos personas a las ceremonias que en Euskadi.

En el lado contrario se encuentran regiones como Murcia y La Rioja, con 164 y 162 invitados de media, respectivamente. También en Andalucía (149) y Castilla La Mancha (141) la afluencia es muy superior. Eso sí, desde el sector elevan la cifra vasca por encima del centenar, con muchas bodas que rondan «los 120 invitados», aunque muy lejos de las cifras de antaño.

En lo que tampoco se parecen unos lugares y otros es en los precios. En Andalucía es donde más barato sale cada invitado, en torno a 144 euros, frente a los 267 de Asturias. El País Vasco se sitúa entre las comunidades más caras, con una media de 224 euros por persona. Multiplicando los 95 familiares y amigos por ese importen, salen unos 21.280 euros por boda, una cuantía que, según el sector, se queda corta.

Menús por encima de 150

«No se hacen bodas de 20.000 euros», asegura tajante Keltze de Azaola, wedding planner con más de dos décadas de experiencia. La media, calcula, está «en unos 35.000 o 40.000 euros», ya que «solamente en dar de comer a los invitados se van unos 15.000 euros». La subida de precios «que todos notamos en la economía doméstica» también ha afectado a los restaurantes, a los que «a raíz de la pandemia» se les ha incrementado «el precio del producto» y, por lo tanto, «el menú», razón por la que es muy difícil encontrar uno «por debajo de los 150 euros».

A los novios, en cualquier caso, «no les importa invertir porque una parte la van a recuperar». Afirma, en ese sentido, que «lo normal es que, como mucho, tengan un 5% de pérdidas entre lo que dan los invitados y la familia». Suelen cubrir «el cubierto y algo más» ya que también ha aumentado lo que aportan los convidados. «La gente estuvo unos años estancada en dar 150 euros por persona, pero ahora están empezando a dar 200 euros», señala la organizadora.

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