Así era Carmen, la maestra asesinada por su hijo adolescente

Al centro llegó hace una década y desde entonces ha guiado a varios grupos de niños en una etapa fundamental en su crecimiento personal. Su empeño era conseguir que los alumnos aprendieran y que adquirieran unos valores que les permitieran disfrutar de una vida plena.

Entregada a su profesión y a sus hijos, acababa de cumplir 60 años. El martes de esta semana, día 30 de abril, celebró el aniversario con sus compañeros en el centro y ya comentaba lo cerca que le iba quedando el momento de la jubilación. Se diplomó en Magisterio en 1990 en la Universidad de Extremadura.

Después de tantos años de trabajo en este colegio emplazado en el mismo corazón de Valdepasillas, era frecuente verla en el corto trayecto que separa su domicilio, en la barriada de María Auxiliadora, de este colegio público, uno de los más valorados en la zona.

Quienes conocen a Carmen Tejero saben lo importante que fue para ella iniciar el proceso de adopción de sus dos hijos, con los que residía en una vivienda situada a las traseras del colegio marista Nuestra Señora del Carmen de Badajoz. Era allí, en un pequeño bloque de pisos, donde había fijado su hogar.

Madre adoptiva de dos hijos, Carmen hablaba abiertamente del proceso de adopción de sus dos hijos. «Todavía me emociono cuando recuerdo la primera vez que abracé a mi pequeña. Se me pone la carne de gallina», explicaba hace cuatro años, cuando confesó que esa experiencia le había cambiado la vida. «Ahora soy más feliz». En ese momento, Carmen Tejero había iniciado los trámites para acoger a su segundo hijo. A ambos los adoptó en solitario.

De sus vivencias familiares hablaba también en sus blogs. En uno de ellos contaba un viaje al país de origen de sus hijos y que uno de ellos pudo reencontrarse con su familia biológica.

Incluso había impartido algunas conferencias. En abril de 2021 pronunció la charla «El papel de los tutores y centros educativos en todo este proceso, con el alumnado y los iguales. Los adoptados también tienen voz«. Lo hizo con María Gatón Lasheras dentro del ciclo programado por la Dirección General de Innovación e Inclusión Educativa de la Junta para analizar la respuesta educativa al alumnado en adopción y acogimiento.

Carmen solía felicitar los cumpleaños de sus hijos a través de los perfiles que tenía en las redes sociales, donde aparecía fotografiados con ellos en distintos rincones de Badajoz. En una de ellas se les veía felices durante el encendido de luces de la Navidad de 2022.

A Carmen Tejero le gustaban también los animales, especialmente los perros. En noviembre de 2021 se le extravió su mascota, Lila, y realizó un llamamiento durante días a través de las redes sociales para intentar localizarla. También fomentaba la adopción de canes y gatos.

El jueves, cuando sus vecinos supieron lo sucedido, no podían dar crédito. Carmen, la vecina de la calle Ámerica, la profesora del colegio los Glacis, la madre de dos hijos, había perdido la vida a manos de su hijo varón.