«El reparto de los alumnos vulnerables debería mejorar la escuela pública»

- ¿Cuál es la situación actual de los colegios de Euskadi? ¿Hay guetos?

- Hay trabajo por hacer. Las formas de agruparse de los alumnos, entre inmigrantes y nativos, entre gente de más recursos y menos, acaba reproduciendo niveles de segregación superior a las de ese territorio a nivel residencial.

- ¿Dónde se ve esa situación de forma más acusada en Euskadi?

- Sin duda en las tres capitales. En ellas hay que repensar el sistema de zonificación. Si creas zonas escolares, pero no están equilibradas desde un punto de vista demográfico o social, no sirven para nada. Las plazas escolares disponibles deben ajustarse a la población a escolarizar.

- ¿Cómo se lograr equilibrar los niveles de alumnado vulnerable entre los diferentes centros?

- Mejorando los sistemas para detectarlos a nivel psicológico, social y económico y creando un sistema de reserva de plazas en las escuelas que permitan una distribución equilibrada. Esto es que durante la matrícula existan plazas para estudiantes desaventajados y otras para los ordinarios. Que en cada comarca, municipio o distrito los centros de esa zona sepan cuál es su reserva de plazas para estos alumnos, y que sea proporcional y equilibrada.

- ¿Qué porcentaje de plazas se valoran reservar para los alumnos vulnerables en los centros?

- Son variables. Hemos trabajado con mecanismos para fijar los umbrales como el socioeconómico. Luego es ya una decisión política establecerlos. La propuesta en la que se va a trabajar es que afecten al 15% de las plazas, a las que se sumarán los alumnos con necesidades educativas especiales. Teniendo en cuenta cuál es la media de Euskadi, habrá zonas con unos niveles más altos o más bajos de reserva de plazas.

- Entonces, seguirá habiendo diferencias entre centros y lugares.

- El modelo pretende mejorar la escolarización dentro de las propias zonas. Evidentemente, hay una segregación entre los distintos municipios o distritos, pero la que se produce dentro de una misma zona es superior. De modo que, redistribuyendo cada zona en sí misma, la ganancia en reducción de la desigualdad es amplia. Las ciudades del sur de Europa tienen niveles de segregación residencial moderados. Representando en las escuelas de cada territorio lo que hay en cada barrio sería suficiente para reducir notablemente la segregación.

- Educación pondrá en marcha este nuevo modelo el próximo curso con las matrículas de los alumnos de 2 y 3 años. ¿Se valora aplicarlo en los colegios que superen en la actualidad el porcentaje de alumnos desfavorecidos que fije la consejería con estudiantes de más edad?

- No, porque supondría un cambio de centro. Existe un derecho a la Educación. Nadie te puede echar de la escuela a la que tú ya vas. Las políticas de distribución equilibrada del alumnado son a medio y largo plazo. La lógica es que los centros que hoy tienen una sobrerrepresentación de alumnado desaventajado progresivamente la puedan ir reduciendo porque, por cuota territorial, por decirlo así, les va a corresponder menos. Y los que ahora tienen menos representación vayan compensando esta situación.

- ¿Este nuevo modelo beneficiará a la escuela pública que, por lo general es la que acoge un mayor porcentaje de alumnos vulnerables para que no se vea afectado su ritmo educativo?

- No tengo ninguna duda. Los efectos negativos de la segregación son de índole muy diversa y una de ellas es sobre el rendimiento y las posibilidades de aprendizaje. Hay una cosa muy importante que se llama el efecto compañero. Si tienes un grupo amplio de alumnos que, por condiciones de vida y de aprendizaje, mantiene un ritmo de aprendizaje, este tira de los que tienen mayor vulnerabilidad y a la inversa. Con lo cual el mayor reparto de los alumnos vulnerables debería repercutir no solamente sobre la mejora de la escuela pública, que tiene una mayor concentración de estos estudiantes sino beneficiar al conjunto de l sistema educativo.

- ¿Cómo?

- Porque puedes aumentar el rendimiento educativo de los alumnos que están peor, que son los que tienen más margen de mejora. Cuando se hacen comparaciones internacionales con PISA, por ejemplo, se ve muy claro que los países que más han conseguido reducir la segregación son también los que más han mejorado en puntuación media de este informe, con lo cual hay una expectativa positiva desde el rendimiento medio.

- ¿Cómo se hará para que alumnos vulnerables no estudien en el colegio que está más cerca de casa o donde tienen a conocidos para evitar su concentración?

- A través de sistemas de elección controlada. La gente tiene derecho a expresar sus preferencias, pero en ningún caso a asistir al centro que quieren. Los poderes públicos tienen no solo el derecho, sino la obligación de satisfacer las necesidades educativas y equilibrar el territorio. Con lo cual nada tiene que cambiar.

- ¿Se va a habilitar algún tipo de mecanismo para controlar que los alumnos desfavorecidos que acudan a un centro concertado más elitista se integren?

- Son mucho peores los riesgos de no integrar porque la segregación tiene consecuencias sobre la falta de cohesión social. Las experiencias que conocemos es que en general los procesos son positivos. Sobre todo cuando se hacen de forma organizada y planificada. Colocar un solo alumno vulnerable en un centro concertado de familias de clase alta es algo poco recomendable porque la integración va a ser problemática. Puede ser objeto incluso de acoso. Pero cuando se hace de forma organizada y es una lógica de cuotas y equilibrio la experiencia nos dice que las integraciones funcionan bien.

- Hay municipios, como Loiu, con una gran concentración de colegios concertados, pero poca población vulnerable. ¿Se va a llevar a ellos alumnos desfavorecidos de otros municipios?

- Por lógica, en este caso, se podría tener en cuenta no solo la situación de Loiu, sino también la de los lugares de residencia de los alumnos de esos centros. Hacer una media y aplicar una cuota. Por otro lado, este modelo lo que busca es reforzar la escolarización de proximidad.

- ¿Y si algún centro concertado no quiere recibir el volumen de alumnos vulnerables que le marca el Gobierno vasco?

- Si hay centros que no están dispuestos a entrar en este tipo de política, existe el mercado. El sistema lo permite. Lo que me parece lógico es que si un centro recibe dinero público, tenga que comportarse como un colegio de interés público.