El Gobierno vasco mejora las condiciones a las empresas para asegurar el transporte escolar

El transporte escolar «estará garantizado» en el arranque del curso para «todo el alumnado» del País Vasco. Así lo confirmó este miércoles la consejera de Educación, Begoña Pedrosa, tras negociar «durante el verano» con diversas empresas del sector. El anuncio pone así fin a un conflicto que dejó sin autobuses a 7.400 alumnos durante la primera semana del curso pasado y que volvía a preocupar este año a miles de familias. «El Departamento ha trabajado de manera discreta y responsable. Nuestro objetivo y compromiso ha sido claro», matizó la titular del Departamento. En este sentido, en nueve días, cuando los alumnos vuelvan a pisar las clases, Bizkaia contará finalmente con 194 rutas programadas, Álava con 128 y Gipuzkoa con 91.

El principal problema estaba en los itinerarios que aún estaban pendientes de ser cubiertos. El Gobierno vasco sacó a licitación los contratos que debían ser adjudicados para asegurar la totalidad de los recorridos, pero muchos de ellos quedaron desiertos. En Bizkaia, por ejemplo, hace unos días la mitad de las rutas seguían sin estar asignadas. Para intentar solucionarlo, el Departamento inició a contrarreloj un proceso de negociaciones 'ad hoc'. Es decir, se reunió con cada uno de los operadores para analizar sus necesidades e intentar llegar a pactos lo antes posible. El proceso, aseguran, se llevó a cabo de manera «intensa y a título particular». «Cada compañía es consciente si con el servicio que ofrecen se gana o se pierde dinero. El Ejecutivo ha negociado directamente con cada uno de nosotros. Ha ofrecido dinero y serán flexibles para que podamos utilizar un mismo autobús en varios recorridos», afirman fuentes conocedoras del proceso.

Optimizar recursos

El Gobierno vasco remarca, sin embargo, que el «presupuesto que se marcó en la licitación no ha variado en exceso» y que las negociaciones «se han centrado en otros aspectos». «El órgano administrativo de recursos contractuales (OARC) validó el presupuesto estimado», remarcan. Aunque no se han llegado a especificar cuáles son esas mejoras dado que «se ha trabajado individualmente», una de ellas es la optimización de los recursos. Los transportistas afirman de hecho que entre los problemas a los que se enfrentaban estaban «la falta de personal y de autobuses» y que «el dinero que ofertaban no sirve ni para cubrir los costes».

Los contratos serán temporales, pero durarán «todo el curso», según informan desde el sector. «Lo que queremos es trabajar. No somos un grupo homogéneo. Se ha demostrado. Cada uno tiene sus necesidades y saben si la prestación va a salir rentable o no», apuntan. Tras los acuerdos alcanzados, desmienten asimismo que las empresas actúen de manera coordinada para dejar desierto el servicio y coaccionar al Ejecutivo para lograr más dinero por los contratos, tal y como estimó la Autoridad Vasca de la Competencia.

La patronal de transportes, que admite haber tenido un papel de «observador» para «no entorpecer» el proceso, felicita a las partes por los pactos alcanzados, pero reconoce que «no se debería agotar el tiempo así». «En invierno el Gobierno vasco deberá sacar una nueva licitación y se tendrán que tener en cuenta las peticiones. Ojalá podamos trabajar con ese pequeño margen de costes. Y si hace falta justificarlos, se hará sin problema», subrayan.

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