Hallan el cadáver de uno de los cinco desaparecidos en Letur: «¡Es Antonia!»

«¡Es Antonia!». El delegado de la Junta de comunidades de Castilla-La Mancha en Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos, confirmó ayer que el cuerpo sin vida hallado a unos doce kilómetros de Letur se corresponde con el de una mujer de entre 65 y 70 años que permanecía desaparecida tras la riada del pasado martes. Desde que la dana destruyó el casco histórico de la localidad, aún permanecen sin ser localizados otros cuatro vecinos del municipio. El hallazgo de Antonia mantienen viva la esperanza por hallar al resto de víctimas.

«Se le ha practicado la prueba de la huella dactilar y existe prácticamente una confirmación de compatibilidad con las huellas. Es Antonia. Podía haber un error y por eso digo 'prácticamente', pero es muy complicado que lo hubiera», confirmó Ruiz Santos.

Ni los más viejos de Letur recuerdan una tromba de agua del calibre de la que sacudió la localidad hace ya una semana. El arroyo local nace en el camping de La Fuente y recoge el agua de todas las ramblas y barrancos que hay desde la Sierra de la Umbría de la Mata y la Sierra del Zacatín. En esa zona, se estima que cayeron más de 200 litros por metro cuadrado en pocas horas, lo que provocó una tromba que fue a parar al arroyo local. La inesperada crecida desbordó el cauce con consecuencias devastadoras.

La riada entró por la puerta principal de acceso a la vivienda de Antonia López, la mujer cuyo cadáver localizaron ayer. Fue como un torrente. El golpe de agua la golpeó con tal fuerza que la sacó por la puerta trasera. El impacto fue de tal magnitud que su cuerpo, según se supo ayer, fue arrastrado por las aguas hasta un paraje situado a doce kilómetros, a la orilla del río.

El presidente de la Diputación de Albacete, Santiago Cabañero, explicó que se trata de una margen del río distinta a la que se accede desde la rambla. El entorno, conocido como La Longuera, es una zona de sedimentación y acumulación de restos, lo que complicó su localización.

El dispositivo de búsqueda contó con la participación del Cuerpo de Bomberos y efectivos del Seprona, junto con perros de la Unidad Canina de la Guardia Civil. «Crean que es muy doloroso tener ante ti a cinco familias (que han perdido a uno de sus miembros) y no poder decirles exactamente de quién se trata», se lamentó Ruiz Santos, al hablar del tiempo que se necesitó para reconocer a la víctima localizada.

El hallazgo de Antonia reduce a cuatro la cifra de desaparecidos en Letur: otra mujer y tres hombres. Se trata de Mónica, su marido Jonathan y los empleados municipales Juan y Manuel. Los servicios de rescate han encontrado en ella un acicate para mantener la búsqueda de los cuatro vecinos que aún faltan. Las labores de rastreo, confirmaron, se van a intensificar. El miércoles, un día después de la tragedia, fue encontrado el cadáver de Dolores, de 92 años.

En Letur se pondrá en marcha este lunes una comisión de coordinación para proceder a su reconstrucción, unos trabajos que según han afirmado las instituciones de la zona durarán cuatro años. Este grupo, que estará formado por representantes del Gobierno de España, la Junta de Castilla-La Mancha, la Diputación Provincial de Albacete y el Ayuntamiento, tendrá una doble función.

A corto plazo atenderán a las personas afectadas por la riada para canalizar las ayudas, y a medio plazo, desarrollarán un plan económico de recuperación de la localidad, que ya tiene nombre: «Plan Letur 2028». Ese es el plazo marcado que se han marcado en este punto de la Sierra del Segura, para que vuelva a ser el que era, uno de los pueblos más visitados de la provincia de Albacete, marcado por la belleza de sus calles y de su entorno natural en el que destaca el arroyo que atraviesa el pueblo, y que ha resultado letal.

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