¿Es posible un gran apagón en España?

El Ministerio del Interior y Red Eléctrica de Austria firmaron el 27 de septiembre un acuerdo de cooperación para la prevención de cortes de electricidad a gran escala. «Un apagón es una de las mayores amenazas para los estados modernos. Si no hay electricidad, la seguridad del suministro, el tráfico, las comunicaciones y, por último, pero no menos importante, la seguridad pública están amenazadas», dijo entonces el ministro Karl Nehammer. Dentro del plan, se incluyó la adaptación de cien comisarías para que pudieran mantenerse en funcionamiento en caso de un fallo de suministro generalizado.

El Ministerio de Defensa austriaco lanzó el día 6 de este mes en YouTube una campaña en la que alerta a sus ciudadanos de que «los expertos esperan un apagón en los próximos cinco años». «Es un riesgo realista y al mismo tiempo subestimado», ha dicho la titular de Defensa, Klaudia Tanner. Ante ello, el país apuesta por preparar al Ejército y las fuerzas de seguridad, además de animar a los ciudadanos a tomar medidas preventivas.

«Podemos descartar con total rotundidad el riesgo de apagón eléctrico», ha dicho Teresa Ribera. La ministra de Transición Ecológica afirma que la estructura de generación eléctrica de nuestro país «es muy potente» y prácticamente duplica la demanda, y destaca que nuestro sistema «es casi una isla», que España no depende de terceros para garantizar el suministro, como le pasa a Austria. Es así: nuestro país prácticamente se autoabastece.

«No existe ningún indicio que haga pensar que pueda producirse un evento de tales características en nuestro país», indican a este periódico desde Red Eléctrica de España (REE). Según el operador, la capacidad nacional de generación -107 GW de potencia instalada- duplica con creces «cualquier pico de demanda que se haya producido hasta el momento», cuyo máximo histórico alcanzó una potencia instantánea de 45.450 MW el 17 de diciembre de 2007.

Además, destacan desde REE, «de producirse una eventualidad similar a la descrita, España dispone de los recursos suficientes para recuperar el servicio y el suministro en muy pocas horas. La resiliencia de nuestro sistema eléctrico ha quedado demostrada en numerosas ocasiones. Por ejemplo, durante la tormenta Filomena, que tuvo lugar a principios de año, el sistema eléctrico español no se vio comprometido y garantizó el suministro eléctrico».

Las sequías y el frío empujaron a los escandinavos en 2012 hacia el sur de Europa, el acceso al agua y los alimentos empezó a generar tensiones en la UE en 2015, Rusia entró en la UE en 2018, los holandeses y los alemanes emigraron masivamente hacia España el año pasado... Eso podía pasar en Europa, según un informe hecho por el Departamento de Defensa de Estados Unidos en 2004.

Titulado 'Un escenario de cambio climático brusco y sus implicaciones para la seguridad nacional de Estados Unidos' y elaborado con la colaboración de «nueve importantes climatólogos», no pretendía «predecir cómo ocurrirá el cambio climático«, sino »dramatizar el impacto que podría tener en la sociedad si no estamos preparados», indicaban los expertos. «El propósito de este informe -advertían en la introducción- es imaginar lo impensable, llevar al límite los conocimientos actuales sobre el cambio climático para entender mejor sus posibles implicaciones en la seguridad nacional de Estados Unidos». Ponerse en lo peor. Lo mismo que ha hecho el Gobierno austriaco.