Suspenden la condena a un preso de ETA aquejado de una enfermedad grave

El juez ha determinado su excarcelación tras 15 años en prisión y será excarcelado de modo inminente desde Picassent (Valencia). La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional accedió a la suspensión de su condena ya dos días antes de la intervención quirúrgica. Se trata de una medida recogida en el ordenamiento jurídico para casos de este tipo, aunque aplicada a cuentagotas. Se basa en la aplicación del artículo 80.4 del Código Penal, que otorga la facultad al juez de suspender la pena en caso de dolencia grave «sin sujeción a requisito alguno».

En España se concedió al recluso Jesús Mari Maiezkurrena en junio de 2017, y poco después Francia hizo lo propio con el vitoriano Oier Gómez Mielgo, recientemente fallecido tras padecer un cáncer. Una muerte que ha reactivado la campaña en favor de la libertad de los reclusos enfermos.

A Aginako únicamente le restaba un año para concluir su condena. Detenido en 2004 en Coulaine, al norte de Francia, tiene un niño junto a su compañera y también presa de ETA Aitziber Coello, con la que compartía prisión. La Policía francesa, en colaboración con la española, les detuvo en una operación contra grupos en «la reserva» de la organización armada. En 2011 Aginako, junto a Coello, fue extraditado de Francia a España, acusado de colaborar con el comando Bizkaia.