Sumar rompe la negociación presupuestaria mientras Bildu y PP exigen «concreción»

El Ejecutivo autonómico respira tranquilo porque parte de la seguridad de tener garantizada la aprobación del proyecto, valorado en 15.728 millones de euros, gracias a la mayoría absoluta de jeltzales y socialistas. Sin embargo, el desarrollo de las conversaciones empieza a desesperar a sus interlocutores porque se sigue sin hablar de cifras detalladas, no hay pasos significativos y hay que tomar una decisión antes del viernes al mediodía. Presentar una enmienda a la totalidad no tiene vuelta atrás, significa la ruptura del diálogo; y renunciar a hacerlo presupone que acabará habiendo acuerdo, aunque sea para una abstención.

Por ahora el único que ha tomado una decisión irrevocable es Sumar, que había presentado ante D'Anjou la oferta más alta de todas con cambios en partidas por valor de 755 millones de euros para modificar unas Cuentas que tachaba de «viejas». La coalición de izquierdas, con un solo escaño en el Parlamento vasco, ha anunciado que no ve margen para una tercera reunión y que presentará una enmienda a la totalidad. Según Jon Hernández, la oferta remitida por el Gobierno se limitaba a pedir su apoyo «sin valorar» sus enmiendas «ni plantear ajustes reales».

Los otros dos actores, EH Bildu y PP, mantienen la línea abierta tras celebrar este mismo viernes sendas reuniones informales con el consejero de Hacienda, quien les ha presentado «un marco amplio sobre el que seguir trabajando». Tan amplio que los grupos llaman a reducirlo para ir a lo concreto. La portavoz parlamentaria de los soberanistas, Nerea Kortajarena, ha criticado que el proceso está siendo «desconcertante», con mensajes «contradictorios», y ha emplazado a D'Anjou y su equipo a tomar decisiones: «Si quieren hacer el camino con EH Bildu o con el PP, y si están dispuestos a asumir las propuestas que hemos hecho en vivienda y respecto a un SMI propio».

Por lo pronto, el secretario general del PSE-EE, Eneko Andueza, ha vuelto a ser claro sobre su preferencia y ha dicho ver «mucho más fácil» un acuerdo con la formación de Pello Otxandiano. El PP, en todo caso, se resiste a levantarse de la mesa. Los populares han presentado al consejero una nueva contrapropuesta con partidas más detalladas sobre los cambios que proponen en las partidas de Salud y Seguridad. Javier de Andrés ha dicho esperar una respuesta «con cifras» por parte del Departamento de Hacienda ya que, según ha añadido, «estamos negociando unos Presupuestos, no un plan de gobierno».