Los sindicatos acusan a Urkullu de «declarar la guerra» a la Ertzaintza

Los encontronazos vienen de lejos y el problema, lejos de solucionarse, parecen agravarse después de que una plataforma ajena a los sindicatos, denominados 'Ertzainas en lucha', logró reunir a unas 4.000 personas en una manifestación en Bilbao. Son muchas las exigencias de los agentes, tanto materiales como salariales, y entre sus amenazas al Gobierno vasco para intentar lograr estas mejoras destaca la organización del Tour de Francia, una fecha clave para Euskadi ya que los ojos de medio mundo estarán mirando hacia aquí.

En el acto, además de Urkullu, también intervino Josu Bujanda, jefe de la Ertzaintza. Recordó a los agentes fallecidos, «muchos» asesinados por ETA, aludió a los insultos de «zipaios» que sufrieron y cómo desde fuera se trataba de «cambiar el modelo» de la Ertzaintza. Ahora, alertó, se pretende hacer desde dentro. El colectivo 'Ertzainas en lucha' ha salido hoy en tromba contra Bujanda acusándole de «faltarles al respeto» al compararles, a su juicio, «con terroristas». «Si se hubieran adoptado medidas durante la última década, el lehendakari hoy no tendría a miles de ertzainas en su contra», apostillaron.

La tensión es evidente, como evidencia el hecho de que los sindicatos tradicionales hayan decidido emitir un comunicado conjunto de enorme calado por su indudable impacto político. «Los diferentes discursos contra la Policía vasca que se vienen dando estos últimos días por parte de la Administración Autonómica y sus altavoces mediáticos son una infamia y constituyen un conjunto de escritos con una clara intencionalidad política: declarar la guerra al colectivo de trabajadores que componen la Ertzaintza», resaltan. «Frente a esto –apostillan–, los ertzainas lo tienen claro, unidad para ganar».

En este sentido, los cuatro sindicatos aseguran que en el caso de la negociación de las condiciones de trabajo en la Ertzaintza «no es una cuestión de lenguaje o falta de voluntad del colectivo», sino «un problema de malabarismos obstructivos de una Administración con una absoluta falta de empatía y compromiso con la Policía Vasca y sus necesidades laborales y materiales».

A su entender, «las descalificaciones contra trabajadores descontentos que reclaman sistemáticamente de forma legal y ordenada una actualización de sus condiciones de trabajo es una infamia, que no es la primera vez que se produce».

«Cuando el Juzgado nos ha dado la razón dos veces con el SAM (Servicio Activo Modulado) les da igual y te dicen que si no estás conforme vuelvas al juzgado; cuando meten la pata en contabilizar los méritos para un despliegue y en vez de rectificar te vuelven a decir que vayas otra vez al juzgado; y cuando desde los sindicatos se les dice todo esto y desde la Administración pasan, con su soberbia y su chulería, desde hace años muy habitual, ocurre lo que estamos viviendo», advierten.

En paralelo, siguen las declaraciones políticas sobre el asunto. El portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, Aitor Esteban, ha afirmado este lunes que ser agente de la Ertzaintza es «más que ser un funcionario ante un ordenador» y ha pedido «sentido de la institucionalidad y de los retos como país». En este sentido, ha recordado que el Tour de Francia es un escaparate internacional y «no responder apropiadamente no sería lo correcto».

Tras reconocer que se trata de una cuestión que le «preocupa», ha asegurado que le sorprende que «la reivindicación de la policía española sea equipararse a la Ertzaintza y en Euskadi los ertzainas pidan 1.100 euros más al mes». «Todo se puede mejorar, incluso más allá del sueldo, pero me sorprende. Todas las reivindicaciones son posibles, pero hay que tener un sentido de la institucionalidad y de los retos como país. Eres más que un funcionario que está ante un ordenador. Ser ertzaina es más que eso y espero que la imagen de la Ertzaintza no quede dañada», ha afirmado.

Por su parte, el secretario general de los socialistas vascos, Eneko Andueza, no ha ocultado su «preocupación». «Si hay protestas por parte de una plataforma o sindicatos, creo que lo más conveniente es que ambas partes se sienten, se escuchen, reflexionen, lleguen a un punto intermedio y se solucione. Eso es lo mínimo, y el PSE siempre va a estar en esa clave», ha asegurado.