La segunda oportunidad de 'Herenegun!'

Tras meses de reuniones con diferentes partidos y asociaciones, de revisar la treintena de aportaciones recibidas, el Gobierno vasco reformuló el contenido del proyecto con el que llevará a los institutos -cuarto de la ESO y segundo de Bachiller- la historia del terrorismo y la violencia en Euskadi. 'Herenegun!' vio la luz en octubre de 2018. La parte más potente, y también la más polémica, del material se apoya en cinco vídeos. Una versión reducida, ahora modificada, de la serie 'Huellas perdidas' de EiTB: cinco documentales ordenados por décadas, desde 1960 hasta 2011. Este último, el año del cese definitivo de ETA.

La primera versión desató una tormenta perfecta. El rechazo al contenido de la unidad didáctica puso de acuerdo a la práctica totalidad de los colectivos de víctimas, a todos los partidos, salvo al PNV, y al Gobierno central. Consideraban que «diluía» la violencia ejercida por ETA y no ayudaba a deslegitimar su existencia, especialmente durante el franquismo. Había que pisar el freno y darle una vuelta a 'Herenegun!'. Así lo reconoció el propio lehendakari, Iñigo Urkullu. Y así lo ha hecho el Ejecutivo autónomo. Los nuevos vídeos ya han sido 'horneados'. Aunque son susceptibles de introducir más cambios. «¿Han mejorado? Sí, pero hay cosas que se deben ir puliendo. Sabemos que no nos va a gustar al 100%, pero seremos constructivos y seguiremos aportando», valoran desde la AVT, primera asociación de víctimas en solicitar la retirada de la versión original.

La narración arranca en los años 60. Pero ya no lo hace con una entrevista al ex miembro de ETA José Félix Azurmendi. En la versión original, Azurmendi era quien recordaba el que fue el primer atentado mortal de ETA, el del joven guardia civil de tráfico José Antonio Pardines. Este asesinato se aborda ahora con material documental. Quien habla en primer lugar es una víctima: Dori Monasterio, hija del taxista Fermín Monasterio, asesinado por la banda terrorista hace cincuenta años. Recuerda a su padre y destaca la importancia de que los damnificados lleven su testimonio a las aulas para que las nuevas generaciones sepan lo que ha ocurrido -ese mensaje es también el cierre del último documental-. Y es que precisamente uno de los cambios de 'Herenegun!' es que los cinco vídeos empiezan ahora con un atentado de ETA. Si la década de los sesenta lo hace con el de Monasterio, la de los setenta, con el de la Cafetería Rolando, en Madrid; la de los ochenta, con Hipercor; los noventa, con el secuestro de Miguel Ángel Blanco, y los 2000, con el testimonio de Eduardo Madina, que perdió una pierna como consecuencia de la explosión de la bomba-lapa que los terroristas colocaron en los bajos de su vehículo.

Las víctimas de la banda han ganado especial peso. No solo las que aparecen con su testimonio, sino que también se menciona a muchas otras a lo largo de los vídeos. Se escuchan 26 voces de afectados, de las que 16 son de ETA -varias de familiares de miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado, que hasta ahora no figuraban-, una de violencia de persecución, dos de los GAL, una de los atentados yihadistas del 11-M, dos de víctimas reconocidas por el decreto del Gobierno vasco sobre violencia policial ilícita, tres de los sucesos del 3 de marzo de 1976 en Vitoria y un último caso sobre la denuncia de Juan Mari Torrealdai, por malos tratos relacionadas con el 'caso Egunkaria', sobre la que se pronunció el Tribunal de Estrasburgo.

El material descansa sobre una «premisa ética», la de «no omitir hecho alguno que haya supuesto un ataque grave a los derechos humanos y al derecho a la vida», defienden desde el Gobierno vasco. El nuevo 'Herenegun!' reduce el espacio destinado a los políticos con el fin de dar más peso a otros contenidos. Incluye una entrevista a Pedro Santisteban, del PCE, partido que convocó -esta vez sí se aclara- la primera manifestación contra ETA en Euskadi. El Ejecutivo ha retirado la alusión a personas asesinadas por ETA acusadas de ser traficantes de droga -la banda justificó así algunos atentados-, y ampliado la referencia a quienes sufrieron violencia de persecución.

Entre otros cambios, los documentales recogen ahora datos sobre la extorsión -aunque no habla ningún empresario-, recuerdan episodios como el nacimiento del lazo azul y las contramanifestaciones que sufrió Gesto por la Paz desde el entorno radical, y el papel que tuvieron las asociaciones de víctimas. Además, se hace referencia no solo a Lemóniz o el TAV, sino también a la autovía de Leizarán. La kale borroka se aborda como parte de la estrategia de la banda terrorista -así se contempló en los noventa en el Código Penal-. Se incluyen imágenes de jóvenes propinando una paliza a un ertzaina fuera de servicio y un dato: entre 1992 y 2007, un total de 1.663 jóvenes fueron fichados por actos de violencia callejera, uno de cada cuatro era menor de edad.

Las torturas -se habla del polémico informe encargado por el Gobierno vasco- y la dispersión de los presos de ETA, desde el punto de vista de las familias, se abordan en los vídeos de 'Herenegun!'. También la 'Ponencia Oldartzen' en favor de la «socialización del sufrimiento» y la ilegalización de sucesivas siglas herederas de Batasuna. Figura en el último vídeo un extracto de la intervención de Arnaldo Otegi -«es más difícil hacer la paz que la guerra»- en el mitin de Anoeta de 2004, con una presentación previa a modo de 'voz en off' que destaca que el líder de la izquierda abertzale «apostó por las vías políticas». A día de hoy, ni Sortu ni Otegi han condenado los crímenes cometidos por ETA. Es por esta razón, según sostienen desde el Ejecutivo autónomo, que se ha mantenido en el material parte de la entrevista a Jone Goirizelaia. La periodista y narradora le recuerda la ruptura de la tregua de 1998 con el asesinato del teniente coronel Pedro Antonio Blanco.

- ¿Por qué no condenasteis el atentado?

-La izquierda abertzale lo que no ha hecho nunca es algo que el otro quiere que haga porque sí o porque ellos consideren que es mejor.

¿Convencerá el nuevo 'Herenegun!' a todos por igual? Sin duda, no. El PP -aún está por ver si se quitará la entrevista de Borja Sémper- y el Colectivo de Víctimas del Terrorismo ya han exigido su retirada. Covite ha solicitado incluso que se quiten los testimonios de dos víctimas de ETA que pertenecen a su junta directiva por considerar que se «falsea el relato». El Gobierno vasco llevará la unidad didáctica en abril a ocho institutos a modo de prueba piloto. Después, se analizará y se planteará de nuevo la posibilidad de ajustar el contenido. Los alumnos debatirán sobre, entre otras, cuestiones como -también se han añadido estas reflexiones en los vídeos-: «¿Por qué es siempre inaceptable atentar contra el derecho a la vida?», «¿ayuda la autocrítica a reparar el pasado?».