El PP reactiva el debate fiscal en Euskadi con una propuesta de bajada generalizada del IRPF

Alfonso Alonso ha presentado este miércoles por la mañana una «ambiciosa» propuesta para reducir la presión fiscal a los contribuyentes vascos. Las modificaciones estarían centradas en el IRPF y la supresión de Patrimonio, Transmisiones y Sucesiones y Donaciones. En total, una ambiciosa operación que supondría recortar la recaudación en más de 1.000 millones de euros. «Es una cantidad que las administraciones vascas pueden absorber sin problema. Además, en estos momentos estamos en superávit y, si dejamos todo ese dinero en el bolsillo de la gente, crecerá el consumo y aumentará la recaudación», ha reflexionado el presidente del PP vasco.

La propuesta plantea que el tipo más alto del IRPF pase del 49 al 45%, mientras que el más bajo descienda del 23 al 18%. Según los cálculos del PP, esta medida supondría un ahorro para las clases medias y bajas de 1.200 euros al año. Además, la iniciativa también incluye reducir el gravamen al ahorro para igualarlo al de las comunidades de régimen común (dejarlo del 19% al 23%), bajar un 5% la cuota general (80 euros de ahorro), así como la base imponible en la tributación conjunta (de 4.280 a 4.400 euros).

Asimismo, plantea aumentar un 15% las deducciones por hijos hasta los 6 años y una nueva de 1.000 euros por cada nacimiento, modificar al alza las desgravaciones de conciliación familiar para incentivar la contratación de empleados del hogar y las de los planes de ahorro, y una mayor deducción para los contribuyentes que convivan con sus padres y para los autónomos que tengan que contratar a alguien para sustituirles en caso de baja.

La propuesta de reforma fiscal también contempla eliminar los impuestos de Patrimonio, el de Transmisiones –cuando se trate de una vivienda de uso habitual entre cónyuges o de padres a hijos– y el de Sucesiones y Donaciones cuando afecte a herencias en los mismos casos.

El PP vasco presentará este proyecto de reforma en las tres Juntas Generales la próxima semana. Su recorrido, al menos a corto plazo, es escaso puesto que PNV y PSE, que gobiernan con mayoría en los tres territorios, ya han descartado sentarse a negociar con los populares cualquier reforma fiscal antes del próximo año –Alfonso Alonso pretendía usar esta bajada de impuestos en las conversaciones con el Ejecutivo vasco para aprobar los Presupuestos de 2020 de Urkullu–. Así que los populares usarán la iniciativa presentada hoy como base para cualquier cambio fiscal que se estudie a lo largo del próximo año en los tres territorios. «Lo que tendrán que hacer PNV y PSE es presentar una alternativa. Tienen obligación de explicar lo que quieren», ha asegurado el presidente del PP.

En ese sentido, Alonso ha recordado que en Navarra los socialistas están dispuestos a suprimir el impuesto de Sucesiones con el apoyo de Geroa Bai, mientras que la Diputación de Bizkaia aprobó en agosto una iniciativa (ahora parcialmente retirada) para reformar la fiscalidad de las rentas irregulares. «Lo hicieron a escondidas, con alevosía. Es un escándalo, un bochorno, una reforma a la carta para unas personas muy concretas», ha valorado. Alonso también ha aprovechado su comparecencia de hoy para criticar con dureza al presidente del EBB, Andoni Ortuzar, por su «grosero y agresivo» discurso del pasado domingo durante el Alderdi Eguna. «Faltó al respeto e insultó a todos aquellos vascos que nos sentimos españoles», ha dejado caer.