Rajoy sigue pasando factura al PNV: «Son los monaguillos de Frankenstein»

Rajoy, en una entrevista concedida a Onda Cero, cargó en la noche del lunes contra los jeltzales por jugar al despiste al trasladar a Felipe VI que Pedro Sánchez no cuenta con su apoyo a día de hoy. «Ya se sabe desde el primer día que lo van a apoyar», aseguró. Y lo harán, subrayó, porque su «único objetivo es seguir en el Gobierno vasco y para ello se subordinan al PSOE y al Gobierno Frankenstein aunque no tengan nada que ver con él».

Los dardos envenenados del expresidente del Gobierno hacia la formación de Andoni Ortuzar han sido constantes en los últimos años. Y eso que Rajoy es poco dado a prodigarse en los medios. Pero desde aquel 2018, es nombrarle las siglas del PNV y no se anda con rodeos. El mejor ejemplo es su libro 'Mariano Rajoy, una España mejor', que se publicó el 3 de diciembre de 2019.

«Desde el primer momento fui consciente de la gravedad de la situación (...) Así se lo dije a mi equipo el mismo día en el que el PSOE registró la moción de censura: 'Dependemos de la personalidad del PNV' (...). Les faltó la personalidad y el coraje necesarios para defender su posición (...) Con esa decisión, dejaron de lado valores como el respeto, el compromiso, la capacidad de diálogo y la gestión bien hecha, además de la estabilidad.

Recuerda que fueron «muchas» las conversaciones con Andoni Ortuzar y «otros dirigentes», pero no fue posible conseguir que Sabin Etxea cambiase de opinión. «Desconozco las razones últimas, aunque sí sé que hubo un intenso debate y criterios enfrentados, pero el resultado fue el conocido. Siempre pensé que en su decisión influyó más la situación en el País Vasco que el debate sobre la moción de censura», recalca. A su juicio, el PNV temía que el PSOE, Podemos y Bildu unieran sus fuerzas en Euskadi con el pretexto del apoyo jeltzale a Rajoy. «El propio Aitor Esteban, que me consta que estaba en contra de la moción, justificó su apoyo a la misma en una demanda de la sociedad vasca», relata.

Le dolió. Quizá se lo esperaba de todos, pero no del PNV. «Nunca he asumido sus planteamientos nacionalistas, pero sí contaron con mi respeto (...) Compartimos un concepto de la política como gestión y no solo como agitación y propaganda. Cuando pactábamos algo, las dos partes lo cumplíamos. Por eso me costó tanto entender su posición: no puedes apoyar a un Gobierno una semana y dejarlo caer a la semana siguiente. Y más aún, hacerlo para poner en su lugar a otro en el que no crees y confías», dispara.

Mucho se ha escrito sobre la supuesta oferta que el PNV hizo a Rajoy para que se echase a un lado y así evitar la moción. El lehendakari Urkullu detalló incluso que los jeltzales le propusieron la fórmula que meses antes había protagonizado Angela Merkel en Alemania: seguir al frente del Gobierno del país pero dejar la presidencia de su partido. A este respecto, el expresidente del PP es contundente: «Por cierto, ninguno me planteó entonces que tuviera que dimitir para dar paso a otro candidato».