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El PP vasco ha reivindicado este viernes, con motivo del 46 'cumpleaños' de la Constitución, la capacidad que la Carta Magna ha tenido desde su aprobación de integrar y asumir la «realidad histórica» de España en un texto «moderno» que es garante a su vez ... de «convivencia» entre «diferentes». Su presidente, Javier de Andrés, que ha participado en el reparto de ejemplares del texto constitucional organizado por Nuevas Generaciones en el centro de Bilbao, ha aprovechado, de hecho, la conmemoración de la efeméride para reivindicar, a su vez, las señas de identidad del partido en Euskadi, constitucionalista pero a su vez defensor de la foralidad vasca.
En ese sentido, De Andrés ha apelado a la «tradición» y a la historia para recordar que Euskadi siempre ha tenido una vinculación territorial con España pero también su propio autogobierno y «fórmulas» de relación (los fueros vascos) que han permitido a los vascos «regirnos por nuestras propias leyes». «Eso lo ha recogido la Constitución: por eso tiene 46 años y por eso va a tener más», ha subrayado el líder de los populares vascos, que ha considerado que esa es una de las razones por las que el entramado constitucional es un «proyecto de éxito» y ha aludido expresamente a la Disposición Adicional Primera de la Carta Magna, que ampara y respeta los derechos históricos de los territorios forales.
De Andrés se ha referido, asimismo, a los datos del último Sociómetro vasco, que marcan mínimos históricos en los niveles de apoyo a la independencia, por la que sólo apuesta un 19% de la población. Igualmente, el rechazo a la secesión es más elevado que nunca. Para el líder del PP vasco, esas cifras demuestran que «los vascos participamos de un proyecto común que es España, en el que hemos participado además desde su creación, somos fundadores de la patria española». Por eso, ha dicho, el texto constitucional es garante de la «unión y cohesión» entre españoles y proporciona «un mínimo común de convivencia» al dar soporte no sólo a los derechos fundamentales de todos los ciudadanos sino también a una «estructura institucional en la que todos nos podamos ver representados».
El presidente de Nuevas Generaciones en Euskadi, Pablo Gómez-Guadalupe, ha confesado sentir «pena» por ser la única organización juvenil de los partidos vascos que realiza un acto en defensa de la Constitución, que ha reivindicado como garantía de que todas las ideologías puedan hacer política «en libertad» y por el consenso que genera, cuando «es más importante que nunca defender lo que nos une» ante la «confrontación» provocada «por la izquierda» de manera «innecesaria e interesada».
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