El PP hace equilibrios internos y dice que el aborto «no es un derecho»

El debate sobre la interrupción del embarazo se ha convertido en un quebradero de cabeza para Feijóo, consciente de las dificultades que existen a la hora de conciliar los intereses de los diferentes sectores que conviven dentro del partido.

En 2014, cuando Mariano Rajoy contaba con mayoría absoluta, Alberto Ruiz-Gallardón acabó presentando su dimisión como ministro de Justicia tras fracasar en su intento por regresar a la legislación de 1985. Ante la fuerte contestación interna, Rajoy se encargó de meter el proyecto en un cajón. Nueve años después, ha sido el aval de Feijóo a la ley de plazos lo que ha soliviantado al ala más conservadora.

Entre quienes han mostrado su malestar están Jorge Fernández Díaz y la plataforma Neos, que abandera el exministro Jaime Mayor Oreja y que ha subrayado que «otorgar al aborto la consideración de derecho es un salto definitivo». Varios de los firmantes del recurso presentado en 2010 también expresaron el viernes su «indignación» por el respaldo público de Feijóo al sistema de plazos y le acusaron de hacer «seguidismo» de la izquierda. A las críticas se han sumado voces como las del obispo de Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, quién ha acusado al PP de «traición» a la causa de la vida de forma «total y absoluta».

En un intento por mitigar el impacto de la polémica, el portavoz de campaña del PP ha recalcado que «nunca he oído hablar al presidente Feijóo de que el aborto es un derecho». Sémper ha subrayado que su formación sigue «pensando lo mismo» que han pensado «siempre» porque «son un partido que defiende la vida como uno de los ejes fundamentales» de su posición política.

Sémper ha afirmado que el PP «acata» la sentencia del Constitucional que, además, va en línea con el derecho comparado de otros países europeos, por lo que ese sistema de plazos es un modelo «aceptado y aceptable por el PP». «Pero ahora hace falta poner el acento en la maternidad, la natalidad y en proteger a la mujer que quiere ser madre».

El dirigente se ha remitido a la ponencia aprobada en el Congreso del PP de 2017: «El PP está firmemente comprometido en la defensa y protección del derecho a la vida. El aborto no debe entenderse como un derecho sino como un fracaso de la sociedad», señala el texto que salió de aquel cónclave.