Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
David Guadilla
Lunes, 9 de octubre 2017, 01:50
Como miembro de la ejecutiva federal del PSOE, Patxi López está toda la semana 'de guardia'. A la espera de acontecimientos. Ve poca salidas al callejón en el que está metido el conflicto catalán. No pierde la esperanza de que «alguien» en el soberanismo catalán ... pise el freno, que quede algún «átomo de 'seny'». Pero se pone en lo peor. No termina de aclarar si el PSOE apoyaría una posible aplicación del artículo 155 de la Constitución. Pero sí define el marco en el que se va a mover su partido. «Apoyaremos medidas para recomponer el orden constitucional y la democracia en Cataluña».
- ¿Hay margen para una salida?
- Claro, que el Govern abandone su intención de declarar unilateralmente la independencia, y que cuando vuelva a la legalidad, busquemos una solución política.
- ¿Pero lo ve factible?
- Supongo que mucha gente diría: '¿para esto nos han traído hasta aquí?'. Pero visto lo que está pasando, la fractura social, la quiebra de la convivencia… espero que quede un último átomo de 'seny' para parar esas máquinas.
- ¿En qué medida puede influir la huida de grandes empresas a que se dé un vuelco a la situación?
- Es una pieza que desmonta las mentiras sobre las que estaba construido todo el relato del independentismo.
- Se habla de una posible solución intermedia que alivie la presión: una especie de declaración de independencia 'en diferido' que abriría un periodo negociador.
- Lo que espero es que no haya declaración de independencia, ni en directo ni en diferido, porque eso no describiría ningún escenario bueno, sino lo contrario. Lo que espero es que se pare esa locura.
- ¿Qué pasos habrá que dar si se proclama esa independencia?
- Restablecer el Estado de Derecho, la democracia, la normalidad constitucional, estatutaria…
Papel de Felipe VI
- ¿Y eso cómo se hace?
- Eso primero tiene que decirlo el Gobierno, que es quien maneja los hilos del Estado de Derecho. Cuál es su intención y su hoja de ruta para hacerlo.
- ¿Apoyaría el PSOE la aplicación del artículo 155 de la Constitución?
- Apoyaríamos medidas para recomponer esa normalidad constitucional y la democracia en un territorio como Cataluña. Lo que han conseguido los independentistas no es romper con España, sino con la democracia. Y el objetivo es recuperarla. Cuando alguien rompe con el Estado de derecho y la democracia, hay que restablecerlo.
- ¿Y entre esas medidas, apoyaría la aplicación del 155?
- Sé que me lo va a preguntar por directa, indirecta o perifrástica, y da igual. Es el Gobierno el que tiene que hacer una propuesta.
- Dentro de su partido hay un debate serio sobre qué hacer.
- Lo que hay que hacer es lo mejor para devolver esa normalidad democrática y recuperar el entramado constitucional y democrático.
- ¿Y eso pasa por tomar el control de los Mossos?
- Es lo mismo. Insisto, es el Gobierno el que tiene que hacer la propuesta. El PSOE va a estar siempre en la defensa del Estado de Derecho.
- ¿Apoyará sin fisuras el PSOE cualquier propuesta que presente el Gobierno?
- Sigue siendo la misma pregunta. Hay que aplicar la legalidad y abrir espacios para la política. El primer llamamiento se lo hacemos a la Generalitat, que nos ha traído hasta aquí por pervertir la democracia. Déjense de este camino al abismo y busquen fórmulas para dar acomodo a la realidad catalana dentro de España.
- ¿Qué le pareció el mensaje del Rey?
- Siempre me gusta que haya apelaciones al diálogo.
- Es decir, que lo echó en falta.
- Pues sí.
- ¿Cree que todo esto puede acabar con Carles Puigdemont y Oriol Junqueras en prisión?
- Eso lo deciden, en primer lugar, ellos. En un sistema democrático ningún ciudadano puede saltarse alegremente la legalidad sin atenerse a las consecuencias. Supongamos que quieren poner en marcha una república en la que todos los ciudadanos pudieran saltarse alegremente las leyes. ¿Ellos lo permitirían? Pues que se apliquen el cuento de alguna manera.
- Póngase en el otro caso, que ese átomo de 'seny' existe y no hay una declaración de independencia.
- Pues existe una comisión en el Congreso en la que podemos estar representados todos y que tiene como uno de sus objetivos dar una solución a lo que está pasando en Cataluña.
Gobierno central
- ¿Sigue pensando el PSOE que la salida es un modelo federal?
- Esa es nuestra propuesta. ¿Que no da respuesta a los independentistas? Seguramente no, pero sí a la gran mayoría de la sociedad catalana. Que Cataluña tenga un reconocimiento de su singularidad, un sistema de financiación correcto, solucionar la cuestión de las invasiones competenciales… Busquemos los problemas concretos que han ido creando esta burbuja y quizás podamos solventarlos.
- ¿Qué le parece todas esas propuestas de mediación que se están poniendo encima de la mesa?
- La mediación la tenemos que hacer los que representamos a la sociedad catalana y española, que para eso nos han elegido. El problema es que en Cataluña ha desaparecido la política desde hace mucho tiempo. Y ahora hemos visto cómo algunos la han sacado a la calle y otros se han parapetado en La Moncloa sin hacer propuestas. Cuando se dice que hay que respetar la Constitución… Es que la Constitución nos ha permitido siempre crear espacios para el diálogo entre distintos.
- ¿Lamenta la actitud del Gobierno de Rajoy?
- No soy equidistante. La culpa de lo que está pasando la tiene el Govern, que ha roto la democracia. Pero tampoco es de recibo que desde hace años hayamos visto cómo se generaba un problema político sin que el Gobierno haya hecho nada. Ni una sola propuesta. La ley está muy bien, ¿pero dónde está la propuesta política?
- Pero si la culpa es del Govern, ¿qué sentido tiene reprobar a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría?
- A mí me gusta ir por pasos. El Govern sacó a la gente para cometer una ilegalidad, cierto, pero luego observamos a un Gobierno de España que nos había dicho que no habría votaciones, urnas, censo… Y lo que contemplamos fue gente votando. Ahí hay un operativo fallido. Fue una imagen de impotencia, de un Gobierno incapaz de garantizar el Estado de Derecho, sobre eso queremos explicaciones.
- Pues a Alfonso Guerra no le ha hecho mucha gracia.
- Porque algunos han creído que pedíamos explicaciones, y ya ve que yo no habló de reprobación sino de petición de explicaciones, por las cargas policiales. Y no es por eso, es porque después de lo que nos habían dicho, el operativo no impidió nada.
- ¿Por qué matiza lo de la reprobación?
- A mí, personalmente a mí, me gusta ir paso a paso. Y primero tienen que ir las explicaciones.
Ambiente
- ¿No hubiese sido más lógico pedir explicaciones a Zoido?
- Parece que quien estaba al frente del dispositivo era Sáenz de Santamaría.
- ¿Qué le parecieron las imágenes de las cargas policiales?
- Se vieron algunos excesos, pero también estamos viendo que algunas escenas no eran reales. 900 heridos, la mujer con todos los dedos rotos… Si esto pasa en Alemania o Francia... Y luego está el papel de los Mossos. Uno tiende a pensar que cuando uno asume un cargo o una profesión pública no se debe al Gobierno de turno, sino a una legislación y a un marco legal que también le protege a uno mismo. Y no vimos eso.
- ¿Esa fractura se puede arreglar?
- He visto cosas que me ponen los pelos de punta, he visto adoctrinamientos de niños, el programa del otro día de TV3, eso es fascismo puro.
- ¿Ve inevitable una consulta pactada?
- Nos gustan tanto los referéndums, que en lugar de uno queremos dos. Que en el conjunto de España busquemos un nuevo acuerdo que mejore la convivencia y que en base a él, en Cataluña se reelabore un nuevo Estatut. Es que el origen de referéndum es la de refrendar acuerdos. Lo que pretende la Generalitat es una votación en la que media sociedad se impone a la otra media.
- Las elecciones catalanas de 2015 demostraron que, al menos en porcentaje, los independentistas no llegaban al 50%, pero que sí hay una mayoría clara a favor de una consulta.
- Porque no hemos combatido ese relato. La gente ha asimilado votar a democracia, y no siempre votar es sinónimo de democracia. Votar sin garantías y para fracturar a la sociedad no es sinónimo de democracia. Esto es antidemocrático.
Patxi López empieza a percibir algunas similitudes entre lo que sucedió en Euskadi y Cataluña. «Salvando todas las distancias, que son enormes, pero he visto alcaldes y concejales sufriendo amenazas, como sufrimos aquí. Hay un clima de opresión… Pensaba que lo habíamos desterrado para siempre de este país».
Aun así, considera que la mirada a Euskadi también sirve para encontrar algo de esperanza. «¿Se puede arreglar la fractura social que se está generando? Se tiene que arreglar. A veces las sociedades nos sorprenden. En Euskadi pensábamos que no iba a ser posible, y todo ha ido mucho más rápido». Además, no cree que la tormenta afecte sustancialmente a Euskadi. «Hemos colocado la política vasca en una situación de tranquilidad y de búsqueda de acuerdos», afirma López, quien alaba a Urkullu: «Ha hecho algunas manifestaciones tranquilizadoras y contenedoras de esa posible deriva. Y el PSE ayuda a dar esa estabilidad».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.